La creciente digitalización de los mercados supone el surgimiento de un gran número de retos y desafíos que las organizaciones deben analizar con perspectiva para redefinir sus estrategias y propiciar la aparición de ventajas competitivas diferenciales. Las nuevas tecnologías representan sin duda un terreno donde poder explorar soluciones imaginativas que permitan a las empresas adaptarse a la realidad de sus clientes, exigiendo al mismo tiempo una transformación permanente que puede llegar a modificar la esencia de la compañía.
Este punto de inflexión puede entenderse, no obstante, como una oportunidad, sirviendo como punto de lanzamiento para el desarrollo de nuevas culturas corporativas estrechamente conectadas con valores que, potenciados de manera integral, pueden comportarse como importantes activos intangibles. Una cultura organizativa asociada a principios como la transparencia y el compromiso puede ayudar no solo a atraer y retener talento, también a generar nuevas oportunidades de negocio.
Esta jornada pretende ser un espacio para compartir conocimiento y descubrir las palancas que ayudarán a implantar nuevos negocios con los que crecer, acercando casos de éxito de empresas valientes que han arriesgado e innovado, no solo para permanecer en el mercado, sino para generar grandes oportunidades de negocio.
La creciente digitalización de los mercados supone el surgimiento de un gran número de retos y desafíos que las organizaciones deben analizar con perspectiva para redefinir sus estrategias y propiciar la aparición de ventajas competitivas diferenciales.
Las nuevas tecnologías representan sin duda un terreno donde poder explorar soluciones imaginativas que permitan a las empresas adaptarse a la realidad de sus clientes, exigiendo al mismo tiempo una transformación permanente que puede llegar a modificar la esencia de la compañía.
Este punto de inflexión puede entenderse, no obstante, como una oportunidad, sirviendo como punto de lanzamiento para el desarrollo de nuevas culturas corporativas estrechamente conectadas con valores que, potenciados de manera integral, pueden comportarse como importantes activos intangibles.
Una cultura organizativa asociada a principios como la transparencia y el compromiso puede ayudar no solo a atraer y retener talento, también a generar nuevas oportunidades de negocio.