Nos acercamos a la automatización de la programación, lo que permite también al profesional ocuparse de lo importante de su negocio. Se acabó destinar tiempo y neuronas a lo accesorio. Pero la figura del programador va a seguir existiendo dado que sus conocimientos son muy demandados en las empresas, sobre todo en nuevas áreas como el machine learning o la inteligencia artificial.
Gracias por tu participación
Comparte el manifiesto y contribuye a impulsar la innovación entre empresas, organizaciones y directivos.