Rupturas de las cadenas de suministros, inflación, cambios de paradigma tecnológico, coyunturas geopolíticas inciertas… La incertidumbre ha pasado de ser una variable a convertirse en un escenario. Un tablero de juego donde no cabe otra reacción que la adaptación inteligente. La complejidad de los tiempos que vivimos requiere de respuestas audaces por parte de cualquier CFO. No caben soluciones simples ni reduccionismos en este contexto.