El Ciclo OW Avanzado de Dirección de Personas, PDP-AV, está dirigido EXCLUSIVAMENTE a los directivos y mandos que ya hayan completado el primer Ciclo OW (PDP-1) con una anterioridad mínima de un año.
El objetivo del Ciclo Avanzado PDP-2AV-, es lograr una mejora real y tangible de los comportamientos directivos y un nivel superior en la gestión de las herramientas OW provocando una implementación de los comportamientos básicos del buen liderazgo y desde ahí, tomar decisiones para una optimización en el uso del tiempo; toma de conciencia de la realidad del nivel directivo que percibe el equipo; pasos a dar para un manejo eficaz de las conversaciones esenciales y el control proactivo para liderar con mayor éxito los retos a través de una excelente dirección de personas.
• 1ª jornada de trabajo en grupo de 4 horas de duración, seguida de un periodo de 2 meses de EPC® (Experiencia Practica Consciente) para implementar los objetivos marcados.
• Continua con 2 jornadas más de trabajo en grupo de 8 horas de duración cada una, separadas entre sí por un período de aplicación y Experiencia Práctica Consciente de 1 mes.
• Una Medición OW 180º de Calidad de Comportamientos Directivos realizada de forma anónima por el equipo directo de cada mando vía online entre la 2ª y la 3ª jornada.
• Una sesión individual de Coaching de orientación y feedback con cada participante, en modo online, de una duración de 45 minutos, realizada antes de la 3ª jornada, para ayudar a cada persona a identificar las áreas a mejorar, ayudando a enfocar las acciones concretas a realizar en su día a día en función del resultado y conclusiones de su Medición OW 180º.
• Posibilidad de acceder a la CERTIFICACIÓN OW DE ALTA CUALIFICACIÓN EN DIRECCIÓN DE PERSONAS.
• El proceso conjunto del primer Ciclo OW y el Ciclo OW Avanzado logra un desarrollo superior, de alto impacto, que proporciona al mando las alternativas y claridad de comportamientos para gestionar y liderar a la altura de la exigencia actual.
• Cada participante toma clara conciencia de forma proactiva y motivante de los aspectos en los que va bien y aquéllos que debe trabajar, obteniendo herramientas claras para progresar.
• Se logran cambios reales y duraderos en la forma de dirigir, con mejoras visibles alcanzando una consciencia muy superior en el ejercicio de los comportamientos adecuados y en el control y dirección de uno mismo.
• El directivo manifiesta una clara satisfacción y seguridad en sí mismo al encontrar y dominar mejor la dirección de personas y la forma de gestionar y afrontar con más éxito las diversas situaciones que conlleva.