Conocer el nivel de amenaza informática para diseñar el mejor sistema de defensa es uno de los principales desafíos a los que se enfrenta el área empresarial. Los últimos datos ponen de relieve el fuerte impacto económico del cibercrimen: solo el año pasado esta problemática ha supuesto más de 500.000 millones de euros a la economía global, lo que supone un 0,8% del PIB mundial.
Al igual que los hackers se adaptan rápidamente a las nuevas tecnologías, las organizaciones, alentadas desde la alta dirección, deben adquirir el conocimiento que les blinde ante posibles ciberataques, diseñados para sustraer información o paralizar la actividad de la compañía. En este punto los expertos coinciden en la necesidad creciente de compatibilizar un equipo especializado en ataques digitales con un sistema de datos sólidos, además de la financiación para desarrollar este tipo de estrategias de seguridad.
Analizar el impacto de esta tendencia en la empresa, conocer las pautas a tener en cuenta para facilitar conexiones seguras y minimizar las brechas de riesgo en seguridad, APD y SERESCO organizan la jornada “Ciberseguridad para directivos”, el 4 de marzo en Oviedo.