Construir cultura en tiempos de disrupción tecnológica será uno de los desafíos más exigentes que van a enfrentar las empresas. Los responsables de las áreas de Talento y Personas ya han recibido el encargo de liderar este nuevo escenario. Son los únicos que pueden asegurar que las organizaciones remen en una misma dirección. Pero no va a ser sencillo…
Sin embargo, y aunque resulte paradójico, el momento para avanzar en este acuerdo entre personas y organizaciones es más favorable que nunca. Entre otras razones, porque las bases del futuro contrato se van a levantar sobre el reconocimiento mutuo. Ambos nos necesitamos más que nunca. Pero, lo que es más trascendente, ambos necesitamos la mejor versión del otro para sobrevivir.