Sin ninguna duda, la seña de identidad de Vitoria-Gasteiz es la sostenibilidad, una seña de identidad que ha ido forjándose y consolidándose a lo largo del tiempo. Hace ahora 10 años, en 2012, la ciudad logró la designación de European Green Capital y en 2019 fue proclamada Global Green City, galardón que concede la organización Global Forum on Human Settlements auspiciada por la ONU.
Estos galardones reconocen un trabajo mantenido en el tiempo con el objetivo puesto en lograr que Vitoria-Gasteiz sea una ciudad sostenible desde la triple perspectiva, tal y como destaca en la presente entrevista Maider Etxebarria, Primera Teniente de Alcalde de Vitoria-Gasteiz y Concejala de Promoción Económica, Empleo, Comercio y Turismo; esto es, capaz de generar riqueza, bienestar y calidad de vida a sus habitantes de forma distribuida y minimizando su huella ambiental.
Sin ninguna duda, la seña de identidad de Vitoria-Gasteiz es la sostenibilidad, una seña de identidad que ha ido forjándose y consolidándose a lo largo del tiempo. Hace ahora 10 años, en 2012, la ciudad logró la designación de European Green Capital y en 2019 fue proclamada Global Green City, galardón que concede la organización Global Forum on Human Settlements auspiciada por la ONU. Estos galardones reconocen un trabajo mantenido en el tiempo con el objetivo puesto en lograr que Vitoria-Gasteiz sea una ciudad sostenible desde la triple perspectiva, esto es, capaz de generar riqueza, bienestar y calidad de vida a sus habitantes de forma distribuida y minimizando su huella ambiental.
Efectivamente, y como dicen todos los expertos en economía, el único camino para salir de la crisis es rediseñar el modelo productivo, y en ese rediseño es fundamental avanzar hacia una economía verde, hacia una economía regenerativa que sea capaz de reintroducir otra vez en los procesos de producción la materia secundaria derivada de dichos procesos, esa materia que ahora llamamos “residuo” y que despilfarramos como si los recursos del planeta fueran infinitos. Transformar esos residuos en materia prima, producir y consumir de otra manera más distributiva, más regenerativa, es el camino para salir de esta crisis, y de las que vendrán, porque nos permitirá ser menos vulnerables.
Detrás de estos galardones hay un trabajo y un compromiso del gobierno local mantenido en el tiempo y enfocado a impulsar la triple dimensión de la sostenibilidad. El compromiso de Vitoria-Gasteiz con el desarrollo sostenible quedó de manifiesto ya en la carta de Aalborg hace 25 años, y en la actualidad, este compromiso se refleja, por un lado, en el acuerdo tácito con los 17 ODS de la Agenda 2030 de Naciones Unidas en los que incardina la totalidad de sus actuaciones estratégicas como institución; y, por otro lado, en su ‘Green Deal’ que es un pacto por el futuro de las próximas generaciones y por la supervivencia del planeta.
Detrás de esos reconocimientos hay un modelo de desarrollo local sostenible entendido como un proceso de transformación de la economía y de la sociedad local orientado a innovar para superar retos y dificultades buscando siempre mejorar las condiciones de vida de su población -a través de una acción concertada con los agentes socio-económicos públicos y privados del territorio- y buscando además la equidad y la minimización del impacto ambiental.
Nuestra estrategia de economía circular pretende concretar a nivel local estrategias de rango superior como el Plan de Acción de la UE para la Economía Circular, incluido en el Pacto Verde Europeo, el Plan de Acción para una Transición Efectiva hacia la Economía Circular del MITECO o la Estrategia de Economía Circular de Euskadi 2030, y que Vitoria-Gasteiz incorpore los principios de la economía circular en todas sus dimensiones, estableciendo un sistema urbano regenerativo, accesible y “ecodiseñado”.
Nuestro sueño es desacoplar la prosperidad de la ciudad y la creación de valor del consumo de recursos finitos, eliminar el concepto de residuo y mantener el valor de los productos y recursos al máximo, y para ello queremos ser una ciudad proactiva en la búsqueda de innovaciones con las que alcanzar ese ideal de ciudad como sistema sostenible. Para lograrlo, se plantea trabajar simultáneamente en tres ejes: aplicar la economía circular dentro de la administración local (Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz y sus sociedades públicas), impulsar la Economía Circular dentro del tejido productivo de Vitoria-Gasteiz y fomentar un modelo de consumo circular dentro del tejido productivo de la ciudad.
Efectivamente, el año pasado el Ayuntamiento puso en marcha la iniciativa Konponder, un proyecto dirigido a impulsar una economía local de carácter más circular interviniendo sobre todo desde la perspectiva del consumo e intentando promover un consumo circular. Así el proyecto Konponder nace con tres objetivos prioritarios:
Y aunque todavía es un poco pronto para hacer un balance de resultados a nivel de impacto ambiental minimizado o evitado y de impacto económico del proyecto, sí podemos hacer un balance desde una perspectiva más general de gobernanza y de colaboración. En este sentido, podemos decir que hemos identificado y contamos con la colaboración de más de un centenar de empresas del sector de la reparación, y este es un buen comienzo para un proyecto que quiere contribuir a transformar la sociedad.
El 26% del PIB de la ciudad proviene del sector industrial y el 20% del empleo generado es industrial, y al ser precisamente la industria el sector sobre el que se va a apoyar la transformación del modelo económico -de un modelo lineal a uno circular, y de un modelo analógico a un modelo más digital-, este carácter industrial es ya en sí mismo un valor de competitividad.
Somos una ciudad con historia y presente industrial, y creemos que nuestro futuro también pasa por la industria como base del proceso de generación de riqueza y empleo. Y para apuntalar este carácter industrial contamos con un Plan Municipal de Apoyo a la Industria (2021-2024) con 6 objetivos estratégicos: apoyar activamente los proceso de digitalización de las industrias, favorecer la innovación en las pymes, favorecer los procesos de diversificación en base a la Estrategia de Especialización Inteligente RIS3, avanzar en la transición de la industria hacia un modelo circular, reforzar un modelo de creación, retención y captación de talento y favorecer el urbanismo industrial como factor de competitividad.
Estos objetivos van retroalimentándose; así, por ejemplo, impulsar la naturalización de las zonas industriales genera un efecto tractor sobre la innovación en nuevos materiales más circulares, o la movilidad sostenible empuja desarrollos digitales. De esta manera, nuestra seña de identidad que comentábamos al principio de la entrevista se convierte también en generadora de valor.
Sí. Llevamos la sostenibilidad en nuestro ADN y la pandemia nos ha demostrado que esta estrategia era acertada porque buena parte de las personas que viajan huyen de destinos masificados y prefieren lugares para visitar en familia, pasear o hacer deporte. Vitoria es perfecta en este sentido. No es casualidad que National Geographic nos eligiera el año pasado como uno de los 25 mejores destinos del mundo para visitar.
Seguiremos reforzando el potencial de nuestros atractivos turísticos; por ejemplo, del Casco Medieval y del Anillo Verde. Mejoraremos la señalización, apostaremos por la digitalización y crearemos nuevos espacios en los que se demuestre nuestro carácter verde.
