Delegaciones Contacto
6 Congreso Marketing y Ventas
Los próximos 8 y 9 de mayo, conoceremos las claves para recalcular las rutas que están afectando a la función de marketing y ventas con la analítica de datos.
Artículo

Hubert de Givenchy: Diseño empresarial haute couture

Por Gabriel Cortina, Managing Director de Linden Lanai & Co.

El reciente fallecimiento de Hubert de Givenchy ha puesto en escena el significado y el alcance de la alta costura. Efectivamente, el diseñador francés pasará a la historia como un gran maestro y uno de los modistos más influyentes en las generaciones posteriores. Ofrecemos una serie de apuntes sobre su actividad emprendedora para comprender cómo logró crear y consolidar una firma de ropa reconocida mundialmente, acompañada de complementos, perfumes y cosméticos.

La actividad empresarial de Hubert de Givenchy (1927-2018) comienza cuando a los 25 años funda su propia casa de moda, denominada Maison Givenchy (1952), y finaliza al anunciar su retiro de la industria en 1995 a la edad de 68 años, tras vender Maison Givenchy al grupo LVMH. Inicia su formación en la Escuela de Bellas Artes de París, pero la motivación definitiva vino de la mano del modisto español Cristóbal Balenciaga, que para él fue su gran maestro. Su etapa de aprendizaje se realiza en los talleres de Lucien Lelong, Piguet, Jacques Fath y Elsa Schiaparelli, figuras todas ellas relevantes y de gran talento. Cabe recordar que las décadas de los cincuenta y sesenta, fueron la edad de oro de la moda en Francia. Luego llegaría el auge de Nueva York, donde el genio de Beauvais también tuvo una notable presencia.

Prêt-à-porter y haute couture

Dos fueron sus principales actividades: prêt-à-porter y alta costura (haute couture). La primera se refiere a la producción bajo estándares de medida, con patrones que se repiten en función de la demanda, con altas calidades y precios. La segunda, a la creación de prendas exclusivas, a la medida del cliente; es moda hecha de forma artesanal, desde el principio hasta el final. Exige proveedores de alta calidad y se valora el detalle, los acabados y los complementos; la orientación final es la venta para un cliente único o la presentación en pasarela. Con el tiempo, terminan en una exhibición de arte, como es el caso de la retrospectiva realizada sobre Givenchy en el Museo Thyssen-Bornemisza (2014) o del Museo del Traje de Madrid, donde se conservan 137 piezas.

Inicia su formación en la Escuela de Bellas Artes de París, pero la motivación definitiva vino de la mano del modisto español Cristóbal Balenciaga, que para él fue su gran maestro

Hubert De Givenchy 1 Hubert De Givenchy 2

Estar al frente de un taller que llegó a tener 250 empleados y ser el máximo responsable de sus diseños y colecciones no es tarea fácil, pues requiere de capacidad de dirección y gestión, al mismo tiempo que dedicar tiempo y recursos para la adecuada comercialización, el estudio, la atención a proveedores, la selección y la formación del equipo. Y junto a todo ello, concentrarse también en las novedades de cada temporada atendiendo a las exigencias y regulaciones dictadas por la Cámara Sindical de la Alta Costura de París de ofrecer dos temporadas anuales y presentar 75 modelos originales. El resultado fue una genuina casa de moda donde se hacía diseño, se creaba moda exclusiva y se imponían tendencias a través de un trabajo realizado de forma exquisitamente artesanal.

Distinción, buen gusto, modernidad

Para la promoción de sus colecciones supo utilizar con acierto a actrices, como Audrey Hepburn, Elizabeth Taylor y Jean Seberg; a personalidades de la época, como la emperatriz Farah Pahlavi, Marella Agnelli, Jacqueline Kennedy, Grace Kelly o la duquesa de Windsor, así como distinguidas familias europeas y norteamericanas, como los Guinness, los Grimaldi y los Kennedy, mujeres todas ellas famosas de los círculos de la cultura, el cine, la política o la empresa.

Para la promoción de sus colecciones supo utilizar con acierto a actrices, como Audrey Hepburn, Elizabeth Taylor y Jean Seberg

Una parte de importante de su visión comercial era la apuesta decidida por las relaciones públicas y por la adecuada repercusión mediática, especialmente para hacerse con el aval de la crítica y como medio para consolidar la firma en el lanzamiento de sus proyectos. La primera colección de Separates es un buen ejemplo. Las acciones que puso en marcha tenían el efecto deseado: muchas clientas querían parecerse a esas mujeres excepcionales, lo que significaba distinción, buen gusto, modernidad. Se trataba de un producto aspiracional de alto standing, pero no como ocurre hoy día, que parece primar únicamente la extravagancia, señal del desprestigio del sector lujo. Sin duda alguna, la actriz Audrey Hepburn fue quien ejerció la mayor influencia. Las portadas de las revistas de moda y tendencias más importantes daban testimonio de ello.

Hubert De Givenchy 348 años de trabajo bien hecho

La diversificación de sus productos se realizó en la gama de perfumes, comercializados bajo la marca Parfums Givenchy, con su hermano Jean-Claude al frente del proyecto. También lanzó una línea de cosméticos. Como novedad, fue el primer diseñador que presentó una colección exclusivamente con modelos negras. Y de entre sus muchos proyectos realizados, recibió el encargo de decorar el hotel Hilton de Bruselas y Singapur, y el hotel Vista de Washington.

Givenchy deja una experiencia empresarial de 48 años con resultados y con beneficio. Cabe destacar su dedicación por una obra creativa, evolucionada, que ha sabido mantenerse en el tiempo. Su legado es un reclamo por el trabajo bien hecho, la importancia a los detalles, la sensibilidad por el cliente y por saber seleccionar. También lo es, y esto es relevante en el actual tsunami voraz de lo tecnológico, por desarrollar una mirada inspirada en el arte, prestar atención a las innovaciones, y valorar la paciencia fecunda del taller y del trabajo en equipo, que es escuela de la genialidad.

El ‘patrón’ de su vida

  • 1927: Nace en Beauvai en el seno de una familia aristócrata francesa.
  • 1944: Se instala en París, donde comenzó sus estudios en la Escuela de Bellas Artes a la vez que trabajaba en distintas casas de moda: Lucien Lelong, Piguet, Jacques Fath y Elsa Schiaparelli.
  • 1952: A los 25 años funda su propia casa de moda, Maison Givenchy.
  • 1953: Empieza su amistad con Balenciaga y conoce a su gran musa, Audrey Hepburn, en las pruebas de vestuario de ‘Sabrina’.
  • 1954: Se convierte en el primer costurero en presentar una línea
    de prêt-à-porter.
  • 1957: Crea su perfume L’Interdit.
  • 1988: Vende la Maison Givenchy al grupo LVMH.
  • 1995: Durante siete años continúa dirigiéndola hasta que finalmente,
    en 1995, se retira.

 

Categorías
Gracias por tu participación
Comparte el manifiesto y contribuye a impulsar la innovación entre empresas, organizaciones y directivos.
Ahora estás visualizando el contenido de APD zona centro.
Si lo deseas puedes acceder a los contenidos adaptados a tu zona geográfica