Los españoles no gozamos de buena salud en cuanto a idiomas se refiere y los datos lo avalan: prácticamente el 60% de los españoles afirma que no habla, ni escribe, ni lee en inglés, según el Centro de Investigaciones Sociológicas. Un dato que no presagia nada nuevo para el sector empresarial ya que se reducen de manera asombrosa las posibilidades de comercializar en el extranjero, algo muy negativo si se tiene en cuenta que vivimos en un mundo y un mercado completamente globalizado.
Los expertos avalan la precaria situación de los españoles en cuanto a los idiomas, tanto que se han convertido en un filtro imprescindible en cualquier proceso de selección. Los candidatos suelen tender a mentir sobre qué idiomas hablan, pero es muy sencillo saber quién lo hace. En este sentido los especialistas en Recursos Humanos destacan no sólo la falta de manejo de un idioma tan básico como el inglés, sino también el desconocimiento de lenguas como el chino mandarín o el japonés que abren a las empresas mercados imprescindibles en estos días.
La realidad es que para un adulto es una tarea hercúlea aprender un idioma nuevo, al contrario que para los niños quienes tienen cerebros más flexibles y pueden convertirse en bilingües en unos cuantos años. La mala noticia es que por muchas series en inglés que veas no vas a convertir en un as de los idiomas.
Esto sucede porque un idioma nuevo es un desafío complejo para tu cerebro. Este debe construir nuevos sistemas cognitivos, para lo que es necesario aplicar tiempo y paciencia, dos variables poco comunes. Además, no todos somos iguales ya que hay quienes están cognitivamente más equipados para aprender idiomas y hay quien no. Las últimas investigaciones al respecto afirman que una de las conexiones más fuertes en el cerebro se producen en el habla y la lectura, por lo que son las más complicadas de generar cuando llega un código nuevo que interpretar.
Según un estudio de la Universidad de Cambridge los españoles son los que peor hablan inglés de toda la Unión Europea. Tan sólo el 22% de los habitantes de la península creen tener un nivel alto o muy alto de este idioma. El panorama es preocupante.
Sin embargo, por fortuna las nuevas generaciones sí tienen niveles adecuados de inglés, pero aún tardarán en llegar al ámbito laboral ya que ni si quiera los millennials -los nacidos entre 1980 y 1995- cuentan con las cotas de idiomas requeridas en un mercado global.
Pese a esto la esperanza es lo último que se pierde y para conseguir hablar inglés like a lord la APD recomienda tres consejos básicos:
