En plena evolución tecnológica, la toma de decisiones estratégicas con IA es cada vez más frecuente. La Inteligencia Artificial está optimizando la toma de decisiones a nivel ejecutivo. Y es gracias a que esta tecnología proporciona información y análisis en tiempo real. Lo cual ayuda a respaldar la toma de decisiones críticas en la dirección de las empresas. De hecho, tal y como indica el estudio The Decision Dilemma, elaborado por Oracle y Seth Stephens-Davidowitz, el 45% de los jefes en España preferiría que la Inteligencia Artificial eligiera en su lugar. Así pues, ¿cómo hacerlo?
La Inteligencia Artificial está optimizando la toma de decisiones a nivel ejecutivo
La optimización estratégica con IA tiene lugar cuando usamos estas soluciones tecnológicas para tomar decisiones informadas por dato. Gracias a la analítica avanzada se pueden tomar decisiones basadas en algoritmos. Así como predecir escenarios futuros o detectar oportunidades o anomalías. Estos son los pasos para incorporarla:
El primer paso para lograr procesos de decisión inteligentes basados en la IA es definir los objetivos y el problema al que nos enfrentamos. Para eso, es imprescindible que los líderes empresariales se apoyen en datos. Pero, en muchas ocasiones no se cuenta con todas las herramientas necesarias para hacer un buen análisis de ellos.
Así pues, en el momento de tomar decisiones estratégicas con IA, se debe identificar en primer lugar cuál es la decisión que hay que tomar. Y el impacto que esta decisión va a tener en la compañía. A continuación, hay que establecer unos criterios claros para la elección, tanto de la tecnología a aplicar como de los datos necesarios que permitan extraer todo el potencial del modelo.
La recopilación de datos es un paso imprescindible para la toma de decisiones guiada por Inteligencia Artificial. Es necesario identificar fuentes de datos relevantes que ayuden a crear modelos predictivos. Una vez se dispone de datos relevantes, el siguiente paso será limpiar, estructurar y validar estos datos. Porque la eficiencia en la toma de decisiones gracias a la IA solo es posible con una estrategia empresarial impulsada por datos.
En muchas ocasiones, el volumen de información del que disponen las empresas es abrumador. Así que es necesario, pues, que cuenten con herramientas ágiles que traten los datos. Solo de esta forma se podrán adaptar a un entorno cambiante, y aprovechar al máximo los datos y el análisis en la toma de decisiones.
No todos los modelos de IA que pueden mejorar la toma de decisiones empresariales son iguales. Hay diferentes tipos de Inteligencia Artificial a nuestra disposición. Y también diferentes grados de implementación de las soluciones para la toma de decisiones. Desde decisiones estratégicas totalmente automatizadas a modelos en los que deciden las personas con el respaldo de la IA y la analítica de datos.
En cualquier caso, dependiendo de las innovación estratégica y tecnológica de la empresa y la complejidad de las decisiones a tomar, se deben elegir los algoritmos de aprendizaje automático adecuados. Y a continuación, entrenar y ajustar ese modelo con los datos de los que disponemos.
Una vez desarrollados los algoritmos personalizados que se adapten a las necesidades de la empresa hay que integrar los modelos de IA en los procesos empresariales. Sólo así se podrá aplicar el modelo a la toma de decisiones estratégicas. Es necesario, también, realizar pruebas exhaustivas para asegurarse que los modelos funcionan correctamente. Y que los resultados que aporta son precisos y adecuados.
Pero la Inteligencia Artificial es una tecnología que está en constante evolución. Es importante, por lo tanto, supervisar el rendimiento del modelo. Y realizar mejoras continuas que garanticen la eficiencia en la toma de decisiones gracias a la IA. De esta forma se podrá asegurar un resultado óptimo a lo largo del tiempo.
Contar con soluciones de Inteligencia Artificial en la toma de decisiones aporta muchas ventajas. Estas son algunas de ellas:
En definitiva, la dirección de las empresas se enfrenta continuamente a decisiones clave para el funcionamiento de la compañía. Estas pueden marcar el futuro del negocio y su lugar en un mercada cada vez más competitivo. Apoyarse en datos y en la innovación tecnológica es fundamental para el éxito de las organizaciones. Y es por eso que aplicar modelos de Inteligencia Artificial en la toma de decisiones puede facilitar esa tarea, incrementar le eficiencia y mejorar los resultados.