Desde el año 2001 viene gestionando todas las empresas del Grupo apostando firmemente por una adecuada gestión de personas, por la innovación y la diversificación de servicios. «Queremos lograr que nuestra plantilla disponga del sentido de pertenencia. Tenemos claro cómo queremos trabajar y queremos que nuestra forma de hacerlo sea un elemento diferenciador con la competencia». Los detalles, en la siguiente entrevista.
Nuestro principal trabajo es la gestión de personas. El reto que asumimos en un sector en el que contamos con la figura de la subrogación obligatoria del personal, es lograr que nuestra plantilla disponga del sentido de pertenencia: si conseguimos que nuestro personal esté satisfecho con su trabajo, se convertirá en el mejor prescriptor de cara a nuestros clientes, podremos fidelizarlos y continuar trabajando con ellos, y garantizaremos la sostenibilidad de nuestra compañía en el tiempo.
Siempre decimos que queremos dejar huella, que las personas que pasen por Lacera nos recuerden no solo por recibir una nómina cada mes, sino porque como clientes internos de esta empresa, se les ha tratado de forma excelente, han disfrutado de la posibilidad de conciliar su vida laboral… En definitiva, han dispuesto de un salario emocional que sumar a esa nómina. Y para conseguir hacer realidad todo esto, nos centramos en el desarrollo de esos valores que nos definen: “Servicio, Personas, Seguridad y Compromiso”.
Existe un ejemplo clarificador: El propietario de un club de fútbol profesional que se disponga a ganar la liga, contrata al mejor entrenador y a los mejores jugadores existentes, todos forman un equipo y su misión es ganar cada jornada. Una empresa no puede ser reduccionista, también debe contar con los mejores profesionales del mercado laboral que la lleven hacia el éxito, sin tener en cuenta su apellido. Nuestra fórmula se basa en hacer crecer Lacera trabajando en equipo, y para ello contamos con el compromiso de los líderes que son los que deben integrar y desarrollar a sus respectivos equipos para la consecución del objetivo común.
Estamos convencidos y forma parte de nuestro ADN vivir en base a nuestros valores. Tenemos claro cómo queremos trabajar y queremos que nuestra forma de hacerlo sea un elemento diferenciador con nuestra competencia. Es una gran satisfacción ver reconocido por terceros alguno de los proyectos que llevamos a cabo, y especialmente tras la modificación de la Ley de Contratos del Sector Público que obliga a adjudicar teniendo en cuenta no solo el precio, sino también criterios de sostenibilidad social y medioambiental, lo que nos viene a ratificar el gran valor de todas esas buenas prácticas de gestión que llevamos a cabo. La aportación de esos activos intangibles al resultado en nuestro caso es evidente.
Vamos asistiendo a la progresiva implantación de los ODS en las empresas, pero no podemos negar que falta mucho recorrido. A nuestro juicio, es fundamental el ODS 10: Trabajo Decente y Crecimiento Económico, para consolidar el pleno empleo y conseguir calidad de vida para las personas y sostenibilidad para las empresas en nuestro país.
El mayor desafío de nuestro sector es la inseguridad que generan los continuos cambios normativos laborales, fiscales y para contratar con las Administraciones Públicas. En un sector con márgenes tan reducidos, cualquier modificación legal repercute de forma contundente en el resultado.
Nuestro sueño pasa por completar la digitalización de los procesos en los que venimos trabajando con el objetivo de disponer de la mayor información posible que, una vez analizada, nos permita una toma de decisiones más ágil para continuar creciendo de forma sostenible, garantizando el empleo de nuestro personal y el resultado para los accionistas.