Las redes sociales ya no son el futuro de la comunicación directa entre la empresa y sus clientes, sino el presente. Si se quiere llegar a una parte importante de esos clientes, hay que tener una presencia en medios sociales que no se quede sólo en lo anecdótico. Y en esa labor pueden ayudar mucho nuestros propios empleados.
Twitter, Facebook o LinkedIn ofrecen rutas de comunicación más directa, rápida y efectiva, y no sólo nos abren un panorama más amplio de potenciales clientes a los que llegar, sino que también pueden facilitar la atracción de talento, la construcción de una reputación, la comunicación de las diferentes iniciativas de la empresa, pueden ayudar a posicionarnos en el mercado…
Las redes sociales ya no son el futuro de la comunicación directa entre la empresa y sus clientes, sino el presente
Tienen muchas ventajas, pero también sus inconvenientes. Y no sólo hay que determinar una estrategia de comunicación en redes sociales que lleve un departamento concreto. Si logramos involucrar al resto de trabajadores en ese esfuerzo comunicativo, los beneficios serán mayores, pero esto tiene que conseguirse de manera natural.
De poco vale que se pida a los empleados que se creen perfiles en redes sociales y que compartan allí los contenidos comunicativos de la empresa si no van a hacerlo motu proprio. Los usuarios de estos medios detectan rápidamente cuando algún mensaje es sincero y cuándo no. Una empresa 2.0 se crea a partir de sus propios empleados.
Marco Cimino, consultor independiente de Social Media Matketing, explica que “la empresa 2.0 construye su imagen, su mensaje, para transmitirlo a sus trabajadores y dejar que sean ellos que establezcan conversaciones con el mercado y con los nuevos trabajadores de la comunidad, asumiendo el riesgo que en algún momento el mensaje pueda modificarse o personalizarse en base a quien lo difunde. Pero esta hace que el mensaje resulte mucho más creíble, porque está compartido por los componentes de la comunidad-empresa”.
La suma de las conversaciones de los empleados también es el mensaje en el mercado de la empresa
Se suele decir que la suma de las conversaciones de los empleados también es el mensaje en el mercado de la empresa 2.0, y esas conversaciones tienen que surgir de ellos mismos. Si la empresa tiene una buena estrategia de contenidos, si crea contenido que sus trabajadores consideren interesante y digno de ser compartido, lo harán.
Esa motivación también puede lograrse incentivando a que los empleados compartan la mejor foto de su lugar de trabajo, o una historia inspiradora, o que cuenten qué tal ha ido la última actividad de teambuilding, o que prueben antes que nadie un producto de la compañía y puedan compartirlo con sus seguidores en Twitter, por ejemplo. Y, si las cuentas corporativas se hacen eco de lo que los trabajadores incluyen en sus perfiles personales, éstos pueden verse reconocidos y pueden animarse a continuar esa conversación alrededor de la empresa.
¿Cómo podemos aprovechar las redes sociales más allá de las publicaciones de nuestros canales oficiales? Según los expertos en la materia, hay tres cosas que son fáciles y rápidas de poner en práctica, y que pueden ayudarnos a mantener esa presencia:
