Impulsado por factores externos a él, el sector legal está sufriendo en este momento una transformación sin precedentes derivado de la aparición de la analítica predictiva.
La información que los profesionales de cualquier especialidad del Derecho manejan para desarrollar su labor es cada día más inabarcable y compleja (pensemos por ejemplo en la ingente cantidad de normas a nivel local, autonómico, estatal y comunitario que cualquier profesional está obligado a conocer, o en los millones de sentencias de los tribunales que conforman la jurisprudencia de nuestro país) y el nivel de exigencia de los clientes hacia los despachos en cuanto a calidad e inmediatez de respuesta es mucho mayor ahora que hace unos años.
Si a esto unimos el notable impacto de las tecnologías emergentes en cualquier profesión técnica, nos encontramos con un panorama realmente complicado al que los abogados debemos hacer frente con una gran dosis de serenidad, capacidad de anticipación, conocimiento del mercado y sentido común.
De acuerdo con los resultados de la encuesta “The Future Ready Lawyer” – “El Abogado Preparado para el Futuro”– que Wolters Kluwer ha elaborado con datos de once países (diez europeos más EEUU), las cinco tendencias de mayor impacto que los profesionales del Derecho esperan para los próximos tres años son:
1. Ser capaces de…
