No es una nueva afirmación argumentar que el buzoneo es un gran medio para dar a conocer un negocio o publicitar una oferta. En este blog, por no ir más lejos, hemos hablado en numerosas entradas de sus múltiples ventajas. Pero en esta ocasión vamos a comentar cómo podemos sacarle aún más partido a esta técnica fusionándola con otros tipos de acciones publicitarias.
Ejemplos de combinación de acciones de marketing con buzoneo
- Pega de carteles publicitarios. Muchas veces, gracias al buzoneo podemos impactar a los posibles clientes de cierto vecindario, pero es más difícil llegar a aquellos que tan sólo están de paso. Los carteles tienen una gran efectividad en zonas con alta densidad de afluencia de público. Esta acción funciona a la perfección para llamar la atención de los usuarios y más adelante ampliar la información con folletos depositados en el buzón.
- Vehículos. Este tipo de publicidad genera mucha atención ya que está en movimiento. Suele resultar en muchos usuarios impactados que oyen y ven la información y cuando llegan a casa la pueden ampliar con el flyer de su buzón.
- Redes Sociales. En los tiempos que corren son el complemento perfecto para el buzoneo. Aunque el reparto de publicidad sea un método tradicional, no debe darle la espalda a las nuevas tecnologías. Además, podrás jugar con el target dejando a modo “teaser” algo de la información en su buzón que podrán completar entrando en las Redes Sociales.
- Reparto en mano. Con el reparto en mano, al igual que con los carteles, se puede impactar a un mayor segmento de la población. Es una de las acciones más directas de marketing y funciona como complemento perfecto para el buzoneo.
Pero estas acciones no darán sus frutos sin saber cuál es el área a de influencia del negocio que se quiere promocionar. No debemos realizar un reparto masivo, sino un buzoneo inteligente en el espacio geográfico idóneo para la actividad del negocio.
Ese espacio cuya población muestre una buena preponderancia para la adquisición de bienes y servicios. Aquel en el cual la distancia y tiempo consumido en el viaje se constituya como variables clave para aumentar o disminuir la atención de los clientes.