AI Revolution
Bajo la convicción de que “es difícil aprovechar todo el potencial de la transformación digital sin tener una estrategia solida de nube híbrida”, Alfred Escala, Cloud Platform Leader de IBM para España, Portugal, Grecia e Israel, analiza en esta entrevista todo el potencial de esta y otras tecnologías como la IA en cada vez más procesos de misión crítica.
Durante la última década, y sobre todo en los dos últimos años desde la pandemia, las empresas han estado impulsando la digitalización y transformado la manera en que operan y se relacionan con el mundo. No obstante, quedan aún algunas cuestiones importantes que resolver en torno a la digitalización y se prevé que la inversión global en transformación digital siga aumentando, hasta duplicarse en 2025.
Por poner algunos ejemplos, el 90% de los datos están no estructurados, lo que supone un gran recurso sin explotar de cara a crear una ventaja competitiva empresarial. También hay un 30% de ingresos que se están perdiendo a causa de procesos ineficientes, por lo que hay una ventana de oportunidad para la automatización inteligente. Por otro lado, las brechas de seguridad son cada vez más costosas, lo que hace que la seguridad siga siendo un reto en el mundo digital. Por último, existe una adopción generalizada del multicloud, que pone de manifiesto que las empresas deben seguir modernizándose para operar con velocidad, consistencia y agilidad en las diferentes nubes.
Esta fuerte combinación tecnológica está acelerando la transformación digital y hace que se esté extendiendo hacia procesos de misión crítica. Principalmente, hay cuatro áreas en las que el uso de estas tecnologías en su conjunto puede favorecer la diferenciación empresarial hacia la ventaja competitiva, que resuelven esos cuatro retos que comentaba antes.
Por un lado, impulsar la accesibilidad de los datos, donde la IA juega un papel importante en su uso y gobierno cuando ya están estructurados. Esta accesibilidad permite después aplicar automatización sobre dicha información, reduciendo los trabajos manuales y consiguiendo resultados de forma rápida, con el uso de flujos de trabajo que funcionan en tiempo real gracias a la nube híbrida.
Para una mayor protección en ciberseguridad, la estrategia del uso de IA y nube híbrida permite modernizar la seguridad y unificar herramientas y datos en entornos híbridos de múltiples nubes. Por último, en el escenario multicloud, estas dos tecnologías permiten la modernización y flexibilidad de las infraestructuras que habilitan el trabajo sobre entornos heterogéneos.
Desde 2014, IBM no ha parado de investigar, de analizar y de observar a las empresas en su adopción de IA. Ahora se está evolucionado de un estado de prueba y construcción de modelos de IA a un estado mucho más operativo, con modelos de mayor madurez. Por ello, en esta fase actual el objetivo es integrar la IA en nuestras operaciones.
Es un error común pensar que la IA es un objetivo en sí misma o que es algo adicional a todo lo demás. La IA sólo toma forma si estamos aplicándola a algo en concreto, es un ingrediente para hacer las cosas de manera diferente. Volviendo a los cuatro retos que citaba antes, se trata de pensar en cómo sacar mayor partido a los datos, cómo mejorar la seguridad, cómo mejorar la automatización y cómo hacer funcionar mejor las diferentes nubes. Por todo esto, mantenemos una apuesta fuerte para hacer la IA escalable a toda la organización a través de esas cuatro áreas.
Podríamos resumirlas en tres capacidades que ponemos a disposición de las empresas con nuestra tecnología o a través de nuestros partners y que marcan la diferencia de nuestra IA.
En primer lugar, el procesamiento de lenguaje natural. Aquí nuestra tecnología está diseñada para entender el lenguaje de las empresas para extraer y analizar los datos. Estas capacidades son las que permiten a las personas obtener conocimiento e interactuar con los sistemas y aplicaciones de IT de una manera más «humanizada».
En segundo lugar, la automatización. La IA utilizada en la empresa debe poder abordar fácilmente la complejidad de las distintas cargas de trabajo y los distintos procesos. Algo posible gracias a la transferencia de aprendizajes de modelos previamente entrenados que luego aprenden continuamente para volverse aún más inteligentes.
Y, en tercer lugar, IBM trabaja en la creación de modelos confiables y explicables. Debemos crear confianza y transparencia en la forma en que la IA hace sus recomendaciones y decisiones. Es fundamental que los modelos y aplicaciones de IA empresarial se puedan explicar, y que midan y validen los resultados con total transparencia. Para ello, la IA debe poder detectar y gestionar el sesgo.
Un estudio reciente de IBM nos permitió observar que un 73% de las empresas españolas considera que es difícil aprovechar todo el potencial de la transformación digital sin tener una estrategia solida de nube híbrida. Sin embargo, la mayoría de organizaciones luchan con la complejidad de hacer que todos sus entornos de nube funcionen juntos.
El problema parece residir en la falta de un enfoque holístico que permita administrar los diferentes entornos de manera integral. Algunas de las principales dificultades que están teniendo las empresas son la falta de habilidades de los profesionales para hacer frente a la nube, la seguridad como una de las barreras para integrar las cargas de trabajo entre diferentes entornos o la excesiva dificultad para garantizar el compliance en la nube.
Gestionar los entornos de nube híbrida de forma segura e integral es posible. Lo que ocurre es que muchas empresas no han adoptado esa estrategia holística, han estado agregando nubes y nubes sin tener en cuenta su integración. Ninguna nube por sí sola puede abordar todos los requisitos de una empresa, por lo que las organizaciones deben ser capaces de utilizar y controlar eficazmente los activos de la nube híbrida en diferentes lugares y de forma integrada para poder abordar las complejidades de seguridad, gestión de datos y compliance.
Esta Región Cloud Multi-Zona forma parte de la visión híbrida que tiene IBM de la nube en la que, de forma integrada, nuestros clientes pueden ejecutar todas sus cargas de trabajo indistintamente, ya sea en entornos de nube privada, pública o distribuida.
Esta región tiene como objetivo ayudar a las empresas en su viaje hacia la nube. En el contexto actual, las empresas necesitan operar de manera ágil, por lo que esta nueva infraestructura dará un impulso en su adopción de la nube de una manera simple, consistente, segura e integrada con toda su infraestructura IT.
Dicha infraestructura, formada por tres centros de datos en tres puntos geográficos diferentes en la Comunidad de Madrid, aportará baja latencia, un gran ancho de banda, alta disponibilidad y un catálogo de soluciones IaaS y microservicios. Todas estas prestaciones permitirán que los clientes de diferentes sectores —especialmente los hiperregulados, aunque no sólo ellos— puedan trasladar sus cargas a un entorno seguro y resiliente para sus negocios.