Una de las principales tareas de cualquier compañía es elaborar un presupuesto de tesorería. Se trata de un tema crucial para asegurar la salud financiera de la empresa. Y para hablar de salud financiera es necesario entender el contexto económico en el que nos encontramos y, sobre todo, hacia el que vamos.
Los últimos indicadores anticipan que la economía española finalmente no entrará en recesión en los próximos meses, pese a la presión inflacionaria, la contracción de la demanda y los altos precios de la energía. El objetivo de cualquier empresa es ser viable a corto y a largo plazo. Pero ¿cómo saber si nuestra organización está preparada para afrontar las dificultades que puedan surgir en el futuro?
Los últimos indicadores anticipan que la economía española finalmente no entrará en recesión en los próximos meses
Es un instrumento financiero para realizar el seguimiento de las entradas y salidas de dinero de una empresa durante un periodo de tiempo concreto en el futuro. Permite proyectar la actividad de un negocio. Gracias a la elaboración de un presupuesto de tesorería se esboza un plan financiero a corto plazo que permite a las empresas prever y controlar sus flujos de efectivo. Se utiliza para determinar las necesidades de fondos de trabajo, planificar las inversiones y las aplicaciones financieras, y establecer las políticas de financiación.
La elaboración de un presupuesto de tesorería permite proyectar la actividad de un negocio
Aspectos como el saldo inicial de efectivo, las entradas y salidas de efectivo previstas, los flujos netos de efectivo, las necesidades de fondos de trabajo, las inversiones previstas y las aplicaciones financieras. También se utiliza para establecer las políticas de financiación, como los préstamos y los plazos de pago.
Incluye el saldo inicial de efectivo, las actividades de explotación, las operaciones de capital y las operaciones del circulante. El saldo inicial de efectivo se refiere al efectivo y los equivalentes de efectivo que la empresa tiene al principio del período presupuestado. Las actividades de explotación incluyen las entradas y salidas de efectivo relacionadas con las operaciones normales de la empresa, como las ventas y los gastos. Las operaciones del capital incluyen las inversiones y las aplicaciones financieras, mientras que las operaciones del circulante incluyen el pago de deudas y la financiación.
A partir de los presupuestos y previsiones de los diferentes departamentos de la empresa: comercial, marketing, administración…
Es importante tener en cuenta que los presupuestos de tesorería deben ser revisados y actualizados regularmente para asegurar su precisión y relevancia. La frecuencia de esta revisión puede variar dependiendo de la empresa, pero en general se debe hacer de forma trimestral.
Un presupuesto de tesorería sirve para proporcionar a las empresas una predicción y control de sus flujos de efectivo. Resulta esencial para el correcto funcionamiento de cualquier organización, ya que tiene varios objetivos relevantes.
Es importante distinguir las previsiones de tesorería del Plan Financiero, donde se detallan los orígenes de la financiación de la empresa, mientras que aquí nos enfocamos en obligaciones de pago y derechos de cobro.
Para cuidar la tesorería de una empresa hay que tener una gran conciencia de todas las operaciones que, de forma directa o indirecta, acabarán repercutiendo en movimientos de efectivo.
Los objetivos de elaborar presupuestos de tesorería son:
Lo más importante para cuidar la tesorería de una empresa es tener una gran conciencia de todas las operaciones
En resumen, un presupuesto de tesorería es un herramienta esencial para cualquier empresa, ya que permite prever y controlar los flujos de efectivo, establecer metas y objetivos a corto plazo, inspirar confianza en los accionistas y en los inversores, y evitar problemas de escasez o exceso de efectivo.
La recuperación económica parece que será más lenta de lo esperado y eso obligará a las empresas a establecer planes de choque con los que asegurar su salud financiera. Estrategias, en definitiva, en las que apostar por la innovación y la tecnología para atajar el gasto superfluo y optimizar la eficiencia de costes.