Visión CEO: Toma de decisiones en entornos complejos
La llegada de la pandemia ha redefinido por completo la concepción del corto, medio y largo plazo en la toma de decisiones estratégicas. La adaptación, innovación y creatividad son recursos a los que se han acogido las organizaciones para combatir la crisis socioeconómica en la que nos hallamos.
En un entorno de incertidumbre, ¿cómo se afrontan los grandes retos del futuro? ¿Cuáles son las claves que garantizan la supervivencia empresarial? Y, sobre todo, ¿cómo se toman las decisiones desde la alta dirección en tiempos de urgencia?
Para dar respuesta a este y otros interrogantes, APD y AON organizaron un ciclo de encuentros sobre la toma de decisiones basada en el conocimiento, donde el tiempo ha sido el protagonista y los CEOs, los ejecutores de la transformación empresarial.
Una de las claves que nos ofrece Andrés Muñiz, eje conductor del ciclo y Managing Director de AON, es la reducción de compromisos financieros y la búsqueda continua de liquidez para asegurar la estabilidad económica. Lógicamente, toda la organización pasa por un replanteamiento de objetivos y retos que habrá que definir y comunicar con claridad para su consecución y logro.
Las crisis ponen a prueba a las compañías y estas sobreviven o no en función de su capacidad de adaptación a las circunstancias. En palabras de Muñiz, “se trata de un proceso de selección natural, si bien es también una fuente de oportunidades”.
La gestión del miedo, la adaptación al cambio y el cuidado de las personas, son imprescindibles para sortear el corto plazo y plantear un proyecto empresarial retador y ágil, con objetivos a medio y largo plazo.
En el caso de ACTIU, la gestión del miedo fue uno de los grandes retos que tuvimos que afrontar para asegurar tranquilidad y seguridad entre los empleados.
Según Soledad Berbegal, Consejera y Responsable de Reputación Corporativa en ACTIU: “Queríamos ser parte de la solución, no del problema. Buscamos ser una empresa amiga”
Otros representantes de empresas líderes como Zamora Company o Ribera Salud han explicado cómo su adaptación resultó ser la clave del éxito a través de la búsqueda de medidas capaces de situar a los empleados en el centro de la estrategia.
La gestión del miedo, la adaptación al cambio y el cuidado de las personas, son imprescindibles para sortear el corto plazo
Las oportunidades derivadas de esta crisis han permitido construir las fortalezas sobre las que se están asentando hoy muchas empresas. Los CEOs que nos han acompañado en este ciclo han sabido detectar dichas oportunidades y aprovecharlas con el objetivo de sacar el mayor rendimiento posible a la pandemia y combatir con sutileza la crisis causada por la COVID-19. Un reto sin precedentes que ha perseguido la continuidad del negocio en entornos muy volátiles.
Para Luis Rodríguez Llopis, Presidente de IDOM, compañía vasca dedicada a soluciones de ingeniería, consultoría y arquitectura, su principal decisión estratégica fue la de mantener y proteger a los equipos con el fin de asegurar la capacidad técnica y de producción para cuando pasara el anticiclón: “poner en riesgo a las personas de IDOM nunca fue una opción entre todas nuestras alternativas”.
En AON lo tienen claro. Cuando propicias un ambiente de trabajo seguro y acogedor las personas se sienten más implicadas con el proyecto y su sentimiento de pertenencia aumenta, lo que permite a las organizaciones gestionar mejor el cambio y adaptarse a las nuevas circunstancias.
La resiliencia empresarial brinda a la organización la oportunidad de afrontar situaciones adversas, facilitar la recuperación y garantizar la continuidad. Está demostrado que los empleados son capaces de adaptarse mejor y mantener la motivación cuando hay resiliencia.
El cuidado de la cultura corporativa jugó un papel fundamental en los momentos más duros y restrictivos de la pandemia. Desde Cinfa, el cuidado de los equipos fue siempre una prioridad aunque, según afirma su presidente, Enrique Ordieres, “al ser una empresa del sector farmacéutico, teníamos mucho recorrido y experiencia en los sistemas de protección y cuidado necesarios para combatir una pandemia”.
El aprovisionamiento de materias primas y el aumento de la capacidad de producción está siendo un verdadero reto para Cinfa, que asegura la reorientación de muchos desarrollos de medicamentos y la adaptación al comportamiento de una nueva enfermedad desconocida para todos.
El cuidado de la cultura corporativa jugó un papel fundamental en los momentos más duros y restrictivos de la pandemia
Grupo Cosentino y su vicepresidente nunca olvidarán el Estado de Alarma y el momento de diligencia que atravesó la organización y del que supieron sacar sus mejores resultados: “Identificamos 3 prioridades claras: la salud de las personas, la continuidad de negocio y un plan de contención del gasto para salvaguardar nuestra caja».
Han sido muchas las conclusiones de los expertos que han pasado por este ciclo, no obstante, todos coinciden en la puesta en valor de las decisiones estratégicas que, para ellos, han sido fundamentales para seguir adelante y garantizar el negocio.
Un equilibrio nada fácil de conseguir en el que han tenido que asegurar la salud de sus empleados y la perspectiva económica de sus empresas. Sortear las dificultades en tiempos de COVID es, sin duda, una de sus nuevas habilidades adquiridas.