Disfrutar en el trabajo. Sí, es posible

En Steelcase Iberia, consultora estratégica de espacios de trabajo, existe el convencimiento de que la felicidad en el trabajo y disfrutar en el trabajo es posible. No se trata solo de asegurar una alegría constante, sino de garantizar que cada profesional se sienta valorado y que su trabajo tenga un propósito significativo.

Las últimas investigaciones de Steelcase muestran que, valorando a las personas y sus necesidades, se puede mejorar el bienestar y la productividad. Para conseguirlo, esta multinacional diseña e implementa espacios a medida que transforman la forma en la que trabajan las organizaciones gracias a un equipo líder de expertos. La oficina se convierte así en una herramienta poderosa al servicio del CEO, facilitando los procesos de desarrollo y transformación de la compañía.

La primera preocupación de los líderes a la hora de tomar decisiones es el bienestar de los empleados

¿Es posible disfrutar en el trabajo? En Steelcase, la respuesta a esta pregunta es clara: sí. Las investigaciones realizadas por la compañía recogidas en la revista Work Better confirman que estamos frente a un dilema con el bienestar, uno de los grandes retos de las empresas en la actualidad. De hecho, la primera preocupación de los líderes a la hora de tomar decisiones es el bienestar de los empleados, situándose en el 81%.

Vídeo resumen entrevista Alejandro Pociña, Presidente de Steelcase Iberia

Entrevista a Alejandro Pociña, Presidente de Steelcase Iberia – 7 Congreso de Directivos

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Aunque las palabras “disfrutar” y trabajo” pueden parecer incompatibles, la realidad es que su convivencia está cada vez más cerca. Hay que tener claro que este estado de bienestar se consigue ayudando a las personas a sentir que importan como seres humanos y que, tanto ellas como su trabajo, tienen valor. Y en ese punto, el espacio juega un papel clave en el desarrollo del bienestar y en los niveles de compromiso.

En este sentido, Steelcase utiliza su experiencia para ayudar a empresas que quieren transformar sus oficinas para responder a objetivos de negocio, pero también para mejorar el bienestar de los empleados, lo que desarrolla un sentimiento de pertenencia especial con la organización, aumenta la productividad y potencia la cultura de empresa.  

Reconsiderar el bienestar, lograr disfrutar en el trabajo

Las empresas deben invertir tiempo y esfuerzo en diseñar espacios de trabajo que promuevan experiencias positivas para los empleados. Esto implica tomar decisiones informadas sobre lo que realmente contribuye al bienestar. La sensación general de bienestar, satisfacción y plenitud de un empleado es un aspecto clave que determina la diferencia y el éxito de una organización.  

Las 6 dimensiones que conforman el bienestar 

En Steelcase se explora el bienestar para entender cómo los espacios pueden crear entornos con condiciones óptimas para que el empleado se sienta mejor. La dificultad que presenta la consecución del bienestar físico, cognitivo y emocional reside en que cada persona tiene unas necesidades diferentes. Por ello, en la compañía se determinaron 6 dimensiones que conforman el bienestar y que tienen que estar integradas en el espacio de trabajo y, por consiguiente, en la experiencia laboral: 

• Dar sentido. En primer lugar, es fundamental que cada persona encuentre un sentido a su trabajo. La satisfacción de un empleado aumenta cuando es consciente de que sus esfuerzos tienen un impacto significativo. Al comprender el propósito de su labor, su compromiso se fortalece. Los espacios de trabajo, diseñados estratégicamente, pueden jugar un papel crucial en motivar a los empleados y en fomentar su conexión con la organización. 
• Fomentar el optimismo. El estrés está instalado en el día a día de los trabajadores, por eso las empresas que ayuden a las personas a desarrollar la resiliencia y a reaccionar a retos cotidianos de forma positiva gestionarán mejor una situación laboral crítica y obtendrán mejores resultados. En este sentido, el diseño del espacio de trabajo puede ayudar a las personas a tener una mentalidad positiva, un aprendizaje más extenso y una capacidad de adaptación mayor, entendiendo que el fracaso forma parte del aprendizaje. 
• Cultivar la pertenencia. La oficina no es solo un lugar para trabajar, sino un espacio crucial para forjar conexiones entre los empleados. Un entorno de trabajo bien diseñado puede generar un fuerte sentimiento de comunidad, donde cada persona se sienta aceptada y valorada. Este sentido de pertenencia fomenta la confianza, la empatía y el compromiso entre todos los miembros del equipo. Por eso, el diseño y tipo de espacios en una oficina son esenciales y pueden marcar una gran diferencia en el éxito de una organización.
  
  

• Adoptar la originalidad. La originalidad desempeña un papel crucial en el bienestar laboral. Un espacio de trabajo que fomente la creatividad y la individualidad no solo otorga a las personas más capacidad de decisión, sino que también reduce el estrés, aumenta el compromiso y fortalece las conexiones entre los empleados. Al adoptar la originalidad, transformamos el entorno de trabajo en un lugar donde cada individuo se siente valorado y motivado a dar lo mejor de sí mismo. 
• Promover el mindfulness. En Steelcase, el mindfulness, también conocido como atención o conciencia plena, es un estado primordial para alcanzar el bienestar. Esta práctica es una herramienta importante para que los empleados estén centrados en el presente, aumenten su capacidad de concentración y aprendizaje y controlen el estrés. Por ello, implementar espacios para el mindfulness es una tarea indispensable en las compañías a la hora de alejarse de distracciones y estar al 100% sumergidos en sus proyectos, lo que aumenta directamente su productividad.  
• Impulsar la vitalidad. Prácticas saludables como la alimentación sana, el ejercicio o un descanso adecuado deben integrarse en el espacio de trabajo y no hay que tener la percepción de que forman parte de la vida privada del empleado. Asimismo, impulsar la vitalidad es una dimensión que promueve un estilo de vida pleno que favorece la salud de los trabajadores y, por lo tanto, su rendimiento y desarrollo profesional.