Alexa, Siri, Bixby, Asistente de Google… Todos estos nombres de asistentes de voz están cada vez más presentes en nuestro día a día. Y es que el voice search o marketing por voz es una de las grandes revoluciones tecnológicas que se divisan en el horizonte.
En países como Estados Unidos por ejemplo, el audio online es ya una pieza clave de la estrategia para los departamentos de marketing. Desde que el 4 de octubre de 2011 Apple anunció que incluiría en su iPhone 4S un sistema de inteligencia artificial que tendría funciones de asistente de voz llamado Siri se ha abierto un mundo lleno de posibilidades en los que la voz adquiere el principal protagonismo. ¿Preparados para la Era del marketing por voz?
Los Smart speakers son actualmente la tecnología de consumo que tiene un crecimiento más rápido, y un buen ejemplo de ello es que el regalo más vendido de la pasada Navidad en Amazon fue precisamente el Echo Dot, un dispositivo manos libres controlado por voz y que incorpora el asistente virtual Alexa.
Google, por supuesto, fue la primera compañía en lanzar en España Google Home, su dispositivo inteligente por voz, pero es que además, Ikea ya se ha aliado con el fabricante de altavoces Sonos para lanzar su propio altavoz inteligente, que tiene apariencia de lámpara.
El auge de estos dispositivos inteligentes no sólo plantea, por lo tanto, la posibilidad de que estemos ante un nuevo cambio de paradigma. Además, representa un nuevo reto para una gran cantidad de compañías y marcas, que necesitarán ser ‘encontradas’ por estos dispositivos cuando los consumidores soliciten cualquier tipo de servicio, un reto más dentro del proceso de digitalización en el que se encuentran muchas empresas.
Según Comscore, compañía internacional que mide las audiencias digitales de los periódicos en España y que también analiza el comportamiento de los usuarios más allá de los medios, el 50% de las búsquedas que realicemos en 2020 serán mediante la voz. Es decir, en unos años podríamos estar diciendo adiós a las búsquedas SEO (Search Engine Optimization) para abrazar las VOS (Voice Optimization Search) a través de los llamados ‘smart speakers’ o altavoces inteligentes.
Según Google en 2020 la mitad de las búsquedas serán por voz
En el mismo sentido se ha expresado Google, que ya ha avanzado que para 2020 la mitad de las búsquedas serán por voz. El SEO (Search Engine Optimization), por lo tanto, se convertirá en VOS (Voice Optimization Search), y el buscador sólo ofrecerá un resultado cuando se hace una búsqueda por voz.
Es inevitable pues que en los próximos 5 años veamos el paso de la SEARCH ENGINE a un ANSWER ENGINE, y hará imprescindible pensar en cómo se habla, y no en cómo se escribe.
Ante este previsible cambio de paradigma, las empresas deberán, además de definir su identidad corporativa a través de la imagen, redefinir su personalidad a través de una identidad auditiva. De esta forma los clientes serán capaces de distinguir una marca no solamente a través de la imagen, sino que lo harán también a través del sonido.
Coca-Cola tiene una identidad sonora que consiste en 5 sonidos que introduce en todas su publicidades
Numerosos estudios destacan la importancia del audio branding en la identidad de marca y la importancia que puede tener el sonido en el momento de identificar una marca concreta.
En ese sentido uno de los mejores ejemplos de esta práctica es Coca-Cola, que tiene una identidad sonora consistente en 5 sonidos que introduce en todas sus publicidades, y de esta forma además de aprovechar el poder evocador de los sonidos refuerza el reconocimiento de marca.
Como afirma Kevin Perlmutter, Chief Innovation Officer Man Made Music, «el sonido es un atajo para crear conexión sensorial y es 20 veces más rápido que la vista: gastan el doble, recuerdan mejor y comparten más».
No parece que el marketing por voz vaya a desaparecer, sino más bien lo contrario, pero también es evidente que todavía hay algunos problemas de uso y privacidad que se deberán superar antes de que se extienda un uso masivo entre el público.
Algunas de las dudas que se presentan ante estas tecnologías son, por ejemplo, si las máquinas van a ser finalmente capaces de comprender todos los tonos que acostumbramos a utilizar (la ironía, las insinuaciones o suposiciones), o escollos como el de la privacidad de los usuarios ante un aparato que emerge como un Gran Hermano que todo lo escucha.
Pero la evolución de la tecnología conversacional es una incógnita fascinante. No somos aún capaces de prever hasta dónde nos llevarán estos nuevos dispositivos que, por el momento, no tienen un amplio margen de desarrollo.
¿Nos encontramos ante una moda o, por el contrario, se trata de un cambio de paradigma? ¿Estaremos en un par de décadas en lo que Google ha venido a denominar como la Era de la Computación Ambiental? ¿Es el voice search el principal reto para la compañías con presencia online?
