Hoy quiero hablarte de un sesgo que está influyendo inconscientemente en tu manera de tomar decisiones. ¿Por qué los CEOs confundimos demasiado a menudo la “propensión” con la “probabilidad” (algo que acaba invalidando nuestras decisiones)?
“Propensión” es la inclinación o disposición natural a una cosa. “Probabilidad” es un cálculo matemático de las posibilidades que existen de que una cosa se cumpla o suceda al azar. Por ejemplo, “propensión” es la inclinación natural que tienen el Real Madrid o el Barcelona a ganar la Liga, y “probabilidad” es el cálculo de que ello se cumpla por haber fichado a tal o cual jugador.
Cuando tomes decisiones en base a un determinado entorno no dejes llevarte por la propensión. Recuerda que nuestro cerebro distorsiona los recuerdos por el impacto de nuestra propia personalidad. Es decir, confundimos lo que somos con lo que hacemos. Tendemos a recordar mejor aquello que nos impactó emocionalmente de forma significativa, y ello hace que nuestra memoria y nuestra capacidad de decidir cometan errores.
Para hacer frente a estos sesgos inconscientes, es necesario que realices con frecuencia un ejercicio de realismo y de introspección, que identifique los orígenes de tus creencias y tus valores, para no otorgar un peso injusto y desproporcionado a unas personas o unos hechos por encima de otros. Y tú, ¿cómo haces para combatir este sesgo?
Cuídate mucho,
Enrique Sánchez de León