Es habitual escuchar a los expertos dar respuestas a la eterna pregunta: por qué digitalizar una empresa. La digitalización no es crear una página web o una tienda online, es mudar la cultura de la compañía.
Únicamente el 9% de las empresas españolas aún no ha comenzado su proceso de digitalización
Se trata de una evolución que lleva tiempo y que no puede ser llevada a cabo de un día para otro. Las compañías deben usar la tecnología en su propio beneficio y ser capaces de llegar a un público cada vez más digital. Según el Estudio de Indicadores Digitales en la Empresa Española, realizado por IDC Research, únicamente el 9% de las empresas españolas aún no ha comenzado su proceso de digitalización.
Otro dato que arroja el estudio de IDC Research España es que, para más del 50% de las empresas encuestadas, la transformación digital se ha convertido en una prioridad en los últimos dos años. Las compañías españolas se están dando cuenta de la importancia que este cambio de mentalidad tiene a la hora de conseguir ser más eficientes, conseguir una relación más próxima con sus clientes y sobrevivir en un entorno cada vez más competitivo. Pero hay una serie de claves a la hora de digitalizar una empresa.
Se trata de un software que permite unificar las relaciones establecidas con los clientes de una empresa. Se recopila toda la información sobre las gestiones comerciales de un determinado consumidor en un archivo histórico. Esto permite mejorar la atención al cliente, mejorar los procesos de venta, anticiparse a las necesidades de la persona y lanzar campañas mucho más efectivas. Todo ello tiene una repercusión positiva en los resultados de la compañía.
Se trata de una herramienta que permite planificar los recursos de una empresa. Según una encuesta llevada a cabo por Panorama Consulting en el año 2013, un 40% de las compañías que invirtieron en un ERP notaron un aumento de su productividad. Las principales ventajas de este tipo de sistemas es que permiten automatizar los procesos, tener toda la información en una misma plataforma y un importante ahorro, tanto en costes como en tiempo.
El Oxford Dictionary define la IA como “la teoría y el desarrollo de sistemas informáticos capaces de realizar tareas que normalmente requieren la inteligencia humana”. La aplicación de esta clase de sistemas dentro de la empresa permite mejorar la productividad, ya que ciertos procesos se realizarán de manera automática sin necesidad de la intermediación de personas. Según un estudio de Chatbot Chocolate, en 2030 el PIB mundial será casi un 15% mayor gracias a la IA.
El blockchain o cadena de bloques elimina los intermediarios y descentraliza la gestión. El control de todo el proceso recae en los usuarios. Es una base de datos cifrada, que no solamente se aplica a transacciones económicas, para distribuir la información de una manera segura. Un aspecto importante cuando todo se mueve en el universo digital y podría estar al alcance de cualquier persona que intentara perjudicar a una empresa.
Un ejemplo de automatización que se está llevando a cabo en esta era de transformación digital son los conocidos como chatbots. Un software que es capaz de automatizar una conversación y que se usa en los servicios de atención al cliente para responder a las preguntas de usuarios. Relaciona las consultas con la información almacenada en el sistema, resolviendo hasta un 70% de las cuestiones que recibe de una manera totalmente automática.
Existen motivos más que de sobra para iniciar un proceso de transformación digital dentro de una empresa, pero entre los más destacados se encuentran las siguientes razones:
La empresa está presente en el mundo digital y está accesible para los consumidores que se mueven en dicho entorno, que cada vez son más. Además, puede invertir en diferentes estrategias de publicidad que son perfectamente accesibles para todo tipo de compañías, independientemente de su facturación o tamaño. Puede alcanzar a un público que hasta el momento no había sido posible, incluso de una manera más efectiva, ya que es posible filtrar las características de las personas a las que se desea llegar.
Permite tener una mayor cantidad de información sobre la compañía y sus clientes, además de organizarla de una manera más clara. Esto hace que sea mucho más sencillo evaluar los procesos empresariales y tomar decisiones sobre cómo es posible mejorarlos. Ofrece una visión más clara sobre dónde se encuentra un negocio y hacia dónde debe dirigirse para alcanzar sus objetivos.
Están en continuo contacto con lo que acontece a su alrededor. Las compañías tienen información sobre los usuarios, sobre lo que estos quieren y buscan. Esto permite que los contenidos puedan ser adaptados en base a esas necesidades, ajustándose a las preferencias de cada persona. Son contenidos personalizados que no se habrían podido llevar a cabo en un entorno no digital.
El entorno digital genera multitud de información, lo que se conoce popularmente como Big Data. Estos datos pueden analizarse para usarlos en beneficio de la compañía, para entender a los consumidores, sus hábitos de consumo, y anticiparse a sus deseos para ofrecerles aquello que quieren en cada momento.
Las empresas tienen una mejor interacción con sus clientes, pues cuentan con diferentes medios de comunicación a través de los cuales poder relacionarse. De esta forma, obtienen una información valiosa sobre cuáles son sus necesidades y lo que desean obtener de la compañía. Al sentirse escuchados, los usuarios tienen una mejor visión de la marca.
Gracias a este nuevo entorno colaborativo, es posible intercambiar conocimientos que permiten la creación de nuevos productos o servicios, entre otros. Las empresas se ayudan de los usuarios para llevar a cabo ideas innovadoras.
La digitalización no es una moda pasajera, sino que es un cambio de era. Un momento en que las empresas se verán obligadas a subirse al tren o a dejarlo pasarlo pasar sin esperanzas de que haya otra oportunidad como esta en el futuro.