Cómo reclutar millennials es una de las cuestiones clave hoy en día en cualquier empresa, pues son la generación más prometedora y que mayores beneficios puede conllevar.
La etiqueta millennial está dirigida a los nacidos entre los años 1980 y 2000. Algunos medios los denominan generación perdida debido a la falta de oportunidades, la crisis económica o la precariedad laboral, pero son adultos muy diversos y forman la generación más conectada. Destaca su alto nivel educativo y su frustración por no poder alcanzar, debido fundamentalmente a la crisis económica, sus altísimas expectativas laborales.
Dentro de los millennials o esta generación existe una brecha, pues hay que destacar que algunos nacieron en la época digital y otros ya en la analógica. La actitud hacia la tecnología es lo que define a cada uno de estos subgrupos, pues para unos será más importante el cara a cara y para otros el uso de la tecnología.
Los jóvenes cambian de trabajo con mucha frecuencia y sorprende cuando alguno permanece más de un par de años en la misma corporación
La actitud hacia la tecnología dependerá de la cultura y del lugar en el que vivan. Existen adultos mayores que la utilizan con fluidez, aunque sus hijos tienen una actitud diferente por cómo se ha forjado. Cada uno de estos grupos tiene la capacidad de aportar algo diferente y de gran valía. La oportunidad radica en que sepan verlo y valorarlo
En la actualidad ya no es tan común que una persona trabaje en una empresa de por vida. Los jóvenes cambian de trabajo con mucha frecuencia y sorprende cuando alguno permanece más de un par de años en la misma corporación.
Esta es una generación inmediata, se comunica por redes sociales y el smartphone es casi una extensión de su cuerpo. Es ambiciosa, dinámica y creativa. Ve la vida desde otro prisma y por eso trabaja de una forma diferente. Para ellos, viajar o desarrollar proyectos personales es tan importante como tener un alto nivel educativo.
Esta generación en 2020 será el 35% de la fuerza laboral. Ellos saben que las empresas necesitan su frescura, su talento, las nuevas ideas y una forma de pensar diferente. Los millennial se van a comer el mundo, saben el atractivo que tienen en el mercado y no tienen miedos que les lleven a querer asegurar un puesto de trabajo, ya que si no les gusta lo que hay lo crearán ellos mismos.
Un organigrama definido orientará su desarrollo en la empresa, pero no quieren un jefe distante y estricto. Necesitan un líder, una figura de confianza y cercana con la que hablar de tú a tú y que les guíe en su trayectoria.
La comunicación debe ser bidireccional.
El mercado laboral es inestable y los contratos, temporales, por eso la seguridad laboral no consiste en tener un contrato de larga duración, sino en desarrollar habilidades, experiencias y conocimientos que garanticen un CV muy atractivo.
Están siempre en búsqueda de nuevas oportunidades.
La mayor parte de los millennial prefiere trabajar desde casa, pero tan solo puede hacerlo un 43 %.
Un horario flexible que les permita conciliar la vida laboral y familiar es uno de los aspectos más valorados en el trabajo. Esto se traduce en más motivación y mayor bienestar.
Algunos incluso pueden diseñarse su propio horario para trabajar en las horas de mayor rendimiento. Esto se traduce en más beneficios para la empresa.
El espacio de trabajo ha de ser flexible, contribuyendo a la productividad y a la concentración. Debe dedicar diferentes partes al desarrollo, al ocio, al entretenimiento y al aprendizaje. Es muy importante que la empresa esté dotada de la tecnología necesaria para que sean productivos.
Además de este entorno físico, son claves los compañeros y necesitan sentirse cómodos, lo cual aumentará su sentido de pertenencia. El trabajo en equipo y la integración de las nuevas incorporaciones son las claves para tener un ambiente propicio para una mayor productividad.
Esta generación exige un salario acorde a su trabajo y valoran positivamente los incentivos por consecución de objetivos y otra serie de beneficios.
Consideran más importante su bienestar que el salario.
Las ganas de crecer están relacionadas con la ambición profesional y la superación diaria. Se interesan por las empresas que invierten en el desarrollo profesional y académico. Uno de los incentivos que más valoran es costear en totalidad o en parte un Máster en Business Administration o MBA.
Las generaciones anteriores consideran el reconocimiento una recompensa por los años de experiencia y el esfuerzo realizado. Los millennial, por su parte, no lo ven así, lo cual puede crear conflictos internos y contaminar el ambiente laboral debido a su insatisfacción con sus funciones.
En definitiva, la sociedad está experimentando uno de los cambios más revolucionarios que va a precisar un giro en el modelo de gestión y que permitirá que los trabajadores disfruten de su tiempo personal. La empresa que responda mejor a las demandas de esta generación, contará con los mejores profesionales.