“Soy de las personas que piensa que tenemos que encontrar lo que nos apasiona en nuestra vida para poder ser felices y sentirnos realizados”. La española Gisela Pulido, de 24 años, es considerada la Campeona del Mundo más jóven de la historia del deporte. Y es que con tan solo 10 años se proclamó por primera vez campeona mundial de kitesurf. Fue a partir de entonces cuando su vida dio un vuelco y tuvo que empezar a compaginar sus estudios, los viajes por el mundo y sus largas prácticas de kitesurfing para poder llegar a conseguir sus objetivos.
La pasión es algo esencial en lo que hago. Es lo que me motiva principalmente a dedicarme al kitesurf. Si no sintiera esa pasión y felicidad no conseguiría vivir esta vida. Soy de las personas que piensa que tenemos que encontrar lo que nos apasiona en nuestra vida para poder ser felices y sentirnos realizados.
El talento es importante porque si lo tienes innato, es decir, dentro de ti, te va a resultar mucho más fácil conseguir tu sueño o tus objetivos. Por el contrario, si no lo tienes vas a tener que esforzarte más para ello. Pero una persona con talento y sin capacidad de esfuerzo o sacrificio, no podría llegar a alcanzar sus metas. Creo que ambas tienen que ir de la mano.
El miedo a caer es algo que sentimos todos cuando no sabemos lo que va a ocurrir, esa incertidumbre que genera lo que sea que estamos haciendo o a lo que nos estamos enfrentando. Puede ser cultural o educacional, según nos lo haya inculcado nuestros padres. Creo que es bueno sentir miedo porque te hace estar alerta y cometer menos errores, pero sentirlo demasiado puede ser muy contraproducente. Muchas veces tenemos miedo de algo, pero cuando lo sobrepasamos nos damos cuenta de que no era para tanto. El fracaso es subjetivo. Puedes haber fracasado en algo porque no has conseguido lo que querías en ese momento. Pero el haberlo intentado ya es todo un éxito. Es con eso con lo que nos tenemos que quedar.
Cada situación se afronta de una manera distinta. No es lo mismo perder un campeonato, lesionarse, o suspender un examen. En mi caso trabajo mucho con mi mente. Nuestra mente tiene el poder de provocarnos pensamientos positivos que nos ayudarán a afrontar esos obstáculos.
Sería muy difícil enumerar todos los elementos necesarios para alcanzar el éxito profesional. Es algo muy personal y cada uno puede tener los suyos. En mi opinión, si quieres alcanzar el éxito tienes que dedicarte a algo que te haga feliz, que te apasione y te dibuje una sonrisa cada día que te levantas y lo vas a hacer. Después está el esfuerzo, el sacrificio, la constancia, la inteligencia, el talento, tu mentalidad a la hora de afrontar el día a día. Hay mil detalles y factores, pero el primero es el más importante.
Depende de la personalidad de cada uno. ¡Yo soy muy poco conformista! Cuando he alcanzado mi sueño, solo pienso en entrenar más para hacerlo mejor la próxima vez. Pero hay personas que cuando han conseguido su sueño se pueden sentir realizadas y eso les es suficiente. Yo soy una persona que siempre está pensando en retos y desafíos continuamente. Me gusta salirme de mi zona de confort porque eso me hace sentir viva.
Creo que hay muchas similitudes entre el deporte y la empresa. Primero destacaría los rasgos que cada persona tiene, tanto en el deporte como en las empresa creo que son muy parecidos. Somos competitivos, amamos lo que hacemos, nos esforzamos y sacrificamos por aquello que creemos que nos va a llevar al éxito. Incluso a lo largo de nuestro camino podemos llevar a cabo ideas parecidas. Por ejemplo, ¿que sería el CEO de una empresa sin un equipo que trabaje con él? ¿Y que sería Gisela Pulido sin un equipo de entrenadores y preparadores que le ayuden a conseguir lo que más desea? Formar un equipo es importante, tanto para los deportistas como para los empresarios.
Se me hace un poco difícil responder a esta pregunta ya que yo empecé a trabajar con empresas, es decir, mis patrocinadores, cuando tenía 10 años. Y es muy complicado acordarme de la relación que hemos tenido a lo largo de todo este tiempo y como ésta ha ido cambiando. Pero creo que en mi caso, como deportista de élite, siempre he tenido marcas que me han apoyado desde siempre, llevo con Movistar y Red Bull más de 15 años, y nuestra relación siempre ha sido muy cercana. Al final el deportista se tiene que centrar a hacer su trabajo y nos olvidamos de lo que quiere la marca. Y en mi caso creo que he podido hacer ambas cosas. Destacar como deportista alcanzando mis metas, pero teniendo muy presente los valores de la marca y su visibilidad. Con lo cual puedo decir que esa transformación la he vivido de forma muy positiva