“Que se conozca realmente lo que es la Prevención, y se hable de ella en la calle, en las escuelas, en los centros”. Para Lourdes Iscar, Directora General de Osalan (Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales), eso sería sinónimo de ‘éxito’ en todo el trabajo preventivo.
La compañía que dirige está de aniversario en este 2023. Son ya 30 años trabajando por la Prevención de los Riesgos, y la Promoción y Protección de la Salud de las personas en el entorno de trabajo. Como señala en la siguiente entrevista, se ha avanzado mucho en materia de concienciación y sensibilización, pero aún queda trabajo por delante. “En eso estamos”.
Nosotros cumplimos 30 años y son ya casi 28 desde que entrara en vigor la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. ¿Qué considero que ha sido lo más importante a lo largo de todo este tiempo? Yo creo que lo que la Ley consiguió fue universalizar la Prevención de Riesgos Laborales, logró que todas las empresas tuvieran a alguien que se encargara de la seguridad y salud de los trabajadores, y no únicamente aquellas que pudieran permitírselo. Es cierto que queda mucho por hacer, pues los trabajos han ido evolucionando y llegará un momento en el que habrá que revisar la Ley para que abarque todas estas nuevas formas de trabajo.
En cuanto a Osalan, estoy contenta por el hecho de que, hoy por hoy, al menos se conoce más acerca de lo que es la prevención. Hay camino por delante en cuanto a la concienciación y la sensibilización, pero afortunadamente ya no solo se habla de accidentes, sino de cómo trabajar para que estos no se produzcan. Se ha avanzado mucho en la concienciación, aunque como digo, queda trabajo por delante.
Sí, es verdad que nos queda trabajo, a todos. Tenemos deberes para la sociedad entera, tenemos deberes para las empresas y para sus herramientas preventivas que son los servicios de prevención, y tenemos deberes para las Administraciones, evidentemente. Tenemos que seguir trabajando para que las personas que van por la calle, los niños y niñas de los colegios nos pidan, nos exijan trabajo seguro, eso es lo que nos queda por hacer. Y para ello, es fundamental la formación de personas que se dediquen a esto.
La prevención es un trabajo sordo. Es decir, el éxito del trabajo de la prevención está en que no se vea ni se oiga, porque eso querrá decir que se están previniendo los riesgos y no se están produciendo accidentes ni enfermedades.
Pues con mucha dedicación. No podemos hablar ya solo de que hay que hacer una Evaluación de Riesgos, que es lo más conocido en las empresas. No podemos hablar de que hay un Plan de Prevención. Debemos hacer los trabajos con calidad, la empresa debe conocer que esto es una actividad integrada. La Prevención debe estar encadenada desde el inicio de todas las actividades, es la única manera.
Nosotros apostamos por que haya personas dentro de la empresa que coordinen ese trabajo. Es decir, cada nueva actividad, cada nueva compra de una maquinaria, cada nuevo producto químico, cada nuevo diseño de un puesto de trabajo debería estar mirado o estudiado por alguien de Prevención, porque en el diseño de todas esas cosas es donde se previenen los accidentes futuros. Eso es un trabajo continuo. ¿Cómo hacerlo? Con la concienciación del propio empresario/a en este caso, que los hay.
Yo empezaría hablando de lo que quiere decir bienestar en el trabajo, que es una palabra fantástica. Quiere decir que no solo voy a proteger mi salud, sino que la voy a mejorar. Es una palabra que engloba el anterior y el posterior, es decir, integra que cuidemos y protejamos la salud, y, además, la mejoremos.
Hoy en día yo creo que se está confundiendo el bienestar con el hecho de llevar una dieta saludable, hacer ejercicio… Esto está muy bien, pero si previamente no hemos mirado por unas determinadas condiciones de trabajo, no hemos estudiado los riesgos ergonómicos, prevenido los riesgos psicosociales, los riesgos de seguridad, etc., es muy difícil tener bienestar. Vamos hacia la Excelencia. El sueño y hacia donde nosotros queremos llegar es no solo a conseguir que usted no enferme, sino a que los empresarios integren en sus organizaciones todos los Planes de Promoción de la Salud Pública que se ponen en marcha. Esto es el bienestar.
Además de en los riesgos de siempre, a los que no podemos acostumbrarnos como las caídas o los golpes, tenemos que poner el foco en los riesgos ergonómicos, que producen trastornos musculoesqueléticos que, a día de hoy, es donde más días perdidos hay por estas patologías; y en los riesgos psicosociales. Preocupan mucho estos dos riesgos a las empresas.
Los trastornos musculoesqueléticos normalmente son producidos por inadecuaciones de planos de trabajo: de alturas, de sobre esfuerzos para llegar a un sitio determinado, de movimientos muy repetidos, etc., y esos son más fácilmente prevenibles puesto que, en principio, bastaría con estudiar el puesto, y llegado el caso, rediseñarlo.
Con respecto a los riesgos psicosociales hay un miedo generalizado a estudiarlos, parece que haya una búsqueda de culpables: no hay culpa. Una cosa es el acoso, que evidentemente ahí hay culpa siempre. Pero un riesgo psicosocial es otro riesgo más, el trabajo que hace prevención es el mismo: analice qué está pasando, evalúelo, y lo más importante en todos los riesgos psicosociales, establezca medidas. Y eso yo creo que es lo que más ‘susto’ puede causar. Esas medidas preventivas asustan, cuando realmente no dejan de ser información y formación, comunicación y saber qué les pasa a las personas. Hay que sentarse con las personas, observarlas y ver qué podemos hacer. En la mayoría de los casos se soluciona así, aunque por supuesto hay problemas mucho más serios, que son de otro tipo, y hay que afrontarlos de diferente manera.
El lema que hemos elegido define cuál es nuestro objetivo: la integración de la Prevención de Riesgos Laborales a todos los niveles. Hemos querido poner encima de la mesa que trabajamos muchísimas Instituciones, Organizaciones, Fundaciones, Asociaciones, Representaciones Sindicales y Empresariales, Servicios de Prevención… Es decir, hay tantísimos grupos de personas trabajando en materia de Prevención de Riesgos Laborales que nos parecía interesante ponerlo encima de la mesa, y hablarnos y escucharnos entre nosotros.
Hemos dividido en tres líneas fundamentales el congreso, que van un poco también al hilo de nuestros ejes de la Estrategia Vasca que aprobamos en el 2021. Uno de ellos está fundamentalmente dirigido a la Cultura Preventiva, es decir, tenemos que llegar a la sociedad, a las personas que trabajan, a las escuelas, a los universitarios… Queremos llegar a personas de muchos y muy diversos ámbitos.
Una segunda línea de este congreso es la Integración de todos los que participamos en todo esto. Hemos invitado a los Departamentos del Gobierno Vasco con los que nos cruzamos en planes estratégicos. También a las Diputaciones, al Instituto Nacional de la Seguridad Social, a las Instituciones Médicas… ¿El objetivo? Poner de manifiesto que esa integración es necesaria.
Y, por último, la tercera línea son las Herramientas. Herramientas dirigidas a las empresas y a los Servicios de Prevención que pasan por la mejora de la calidad de las actuaciones. Durante estos dos días tenemos más de 30 mesas que giran en torno a estas tres líneas de trabajo.
¡Por pedir que no quede! El deseo fundamental es que las personas no enfermen en sus puestos de trabajo ni tengan ningún daño producido por su puesto de trabajo. Y no solo no enfermen, sino que mejoren su salud. Ese es el mayor de los deseos que se puede pedir en materia de Prevención de Riesgos Laborales.
¿Un segundo deseo? Que se conozca realmente lo que es la Prevención de Riesgos Laborales y se hable de ella en la calle, en las escuelas, en los centros… Igual que hablamos de cualquier otra cosa en la vida. Que se hable de Prevención a todos los niveles, para mí ese sería el éxito de todo el trabajo preventivo.