SectorES en clave de FUTURO
Ha llegado el momento de actuar. Y es que como afirman desde DKV “no hay salud humana sin un planeta sano”. Desde la aseguradora llevan más de 20 años desarrollando iniciativas de negocio responsable para impulsar un mundo más saludable. Una responsabilidad que, tal y como afirma su CEO, Josep Santacreu, “es de todos”. En la siguiente entrevista desgrana los proyectos en los que está inmersa la compañía que dirige, así como los principales retos a los que habrá de enfrentarse el sector, cuyo futuro “debería pasar por la telemedicina, por poner al cliente en el centro y por defender las causas activistas”.
En DKV estamos convencidos de que no hay salud humana sin un planeta sano, porque los comportamientos y hábitos saludables son imposibles en un entorno contaminado. Por lo que sí, todas las empresas tendrían que ser activistas por la salud humana y la del planeta. Las empresas debemos dejar de decir que queremos ser parte de la solución y serlo realmente.
En DKV hace más de 20 años que desarrollamos iniciativas de negocio responsable para impulsar un mundo más saludable. Esto se debe a que nos definimos como empresa con una importante responsabilidad con las personas y el planeta.
Hace mucho tiempo que somos activistas de la salud, pero fue en marzo del año pasado cuando presentamos este posicionamiento, con el que apelamos directamente a la sociedad para que todo el mundo se involucre de manera directa en causas como el cuidado del medio ambiente, la inclusión de las personas con discapacidad, la alimentación sostenible, la lucha contra la obesidad infantil y el bienestar de la mujer.
Queremos ser la empresa de seguros y servicios de salud española que más contribuye a reducir el impacto del cambio climático en la salud de las personas y en la del planeta en el 2030.
Imagino un planeta en el que tengamos salud porque el planeta está sano; un planeta en el que hayamos recuperado la biodiversidad para evitar futuras pandemias; reforestado los bosques para absorber el CO2 que nos ha llevado a la crisis climática; y hayamos reducido el consumo de carne y apostemos por los alimentos ecológicos de cercanía y por una dieta equilibrada; un planeta donde las personas no tengan que emigrar por culpa del deterioro ambiental…
Los 10 compromisos que queremos cumplir son:
No es tan importante cuáles son esas soluciones, sino que el momento de actuar es ahora. Menos bla bla blá y más actuar. El planeta ya ha soportado demasiado tiempo la pasividad de unos y el maltrata de otros. ¡Hay que pasar a la acción y hay que hacerlo ya! Nosotros ya hemos empezado. Una buena manera de comenzar es con pequeños actos: con nuestra alimentación, utilizando el transporte público, evitando al máximo los plásticos, etc.
Queremos que se perciba a DKV como una empresa líder en España por su compromiso contra el cambio climático. Creemos firmemente que la actividad responsable de una compañía va mucho más allá de su política interna de ahorro energético o de gasto de papel.
Ya tenemos productos que expresan nuestras prioridades: como seguros de hogar ecológicos (materiales de reparación y detergentes sin tóxicos) que velan por la calidad del aire interior en las reparaciones y evitan el cóctel de contaminantes.
Facilitamos la compra de productos de alimentación ecológica, el acceso a servicios de aislamiento térmico o de electricidad verde. Incluso nos hemos atrevido a innovar en el sector funerario desarrollando la única y pionera póliza de decesos que vela por la huella de tu último paso.
Debe serlo, porque el cambio empieza por uno mismo, desde ahora y todos –en pequeña o gran medida–, somos responsables de eso.
Creo que los consumidores cada vez piden más empresas que se posicionen. La conciencia social sobre la emergencia climática no deja de crecer y se sitúa como una de las grandes preocupaciones.
La crisis sanitaria provocada por la COVID-19 ha despertado más miedo y más reacción que la crisis climática, porque la percepción es de efecto inmediato. Pero creo que ha hecho que más gente se plantee una realidad: la crisis climática es mucho más grave y urgente que la del coronavirus.
Este estudio es posible gracias a la observación de 78 indicadores que, agrupados en cinco dimensiones: salud de la población; entorno; condiciones socioeconómicas y laborales; comunidad; y servicios de salud. Algunas de las conclusiones son:
Las cuatro principales ciudades estudiadas: Madrid, Barcelona, Zaragoza y Valencia, presentan una puntuación general superior a la media, que se sitúa en un 70%. Concretamente, Madrid cuenta con un 73,9%, Barcelona con un 71,6%, Zaragoza un 72,3% y Valencia un 72,7%.
Todas las ciudades estudiadas (52 en total) presentan rendimientos medio-altos, es decir, cumplen entre el 50% y el 75% de los objetivos marcados, en el estado de la salud y aspectos socioeconómicos.
Yo creo que deberían mejorar las tres categorías mencionadas pero, especialmente, la dimensión de la comunidad. Creo que vivir una pandemia nos ha hecho más solidarios y menos individualistas, por lo que ahora nos preocupamos más por los demás.
El futuro del sector asegurador debería pasar por la telemedicina, por poner al cliente en el centro y por defender las causas activistas por las que luchamos en DKV: el cuidado del medio ambiente, la inclusión de las personas con discapacidad, la alimentación saludable, la lucha contra la obesidad infantil y el bienestar de la mujer.