Dijo Steve Jobs que cuando se innova, se corre el riesgo de cometer errores, pero que “es mejor admitirlo rápidamente para continuar innovando». Esta máxima pronunciada por el creador de Apple resume el pensamiento de muchas compañías de éxito de nuestro país reconocidas internacionalmente que, lejos de anquilosarse en modelos de negocio tradicionales, apuestan decididamente por las ideas, la tecnología, la digitalización, la eficiencia y, por supuesto, por la diferenciación. Agitan ese cóctel y crean brillantes proyectos, una y otra vez, que no solo reportan grandes beneficios, sino que además generan valor en nuestra sociedad. Crean auténticos ecosistemas de innovación.
No existe la innovación si una idea o un proyecto no es capaz de generar valor y provocar un impacto
Es el caso de Ferrovial, una de las empresas de más éxito de nuestro país, cuya actividad innovadora se materializa en más de 100 proyectos distintos en curso, con una inversión de más de 47 M€ en I+D. Y es el caso también de Capgemini, compañía líder en consultoría, tecnología y transformación digital, que asesora a las mayores empresas del mundo a la hora de abordar procesos de innovación con un firme objetivo en mente: que logren ventajas competitivas en el mercado.
APD ha reunido en un encuentro a dos de las personas más autorizadas para hablar de innovación en el ámbito empresarial en este momento: Francisco Bermúdez, Consejero Delegado de Capgemini España; y Federico Flórez, Director General de Sistemas de Información e Innovación de Ferrovial. Ambos confluyen en un mismo punto: «No existe la innovación si una idea o un proyecto no es capaz de generar valor y provocar un impacto. Pero apostemos decididamente por las ideas, que son las que impulsarán nuestros negocios».
En concreto, para Bermúdez «innovar es hacer las cosas de forma distinta a como las hemos hecho hasta ahora, siempre y cuando ese cambio aporte valor. Se trata de evolucionar, transformar, crear ideas y generar nuevas fuentes de ingresos. Y la tecnología juega un papel fundamental en ello».
De la misma opinión es Flórez. Desde Ferrovial definen la innovación como una nueva forma de hacer las cosas, pero, como apuntaba Bermúdez, siempre que cree valor: «Puede ser un valor económico, un retorno de una inversión, una eficiencia, pero también hay valor en otras cosas. En nuestro caso, en la seguridad de los empleados. Tenemos a muchas personas trabajando en la calle y cualquier cambio que aporte más seguridad a los empleados puede ser innovador».
Sin duda la digitalización juega un papel fundamental en todo esto. Tal y como señala Flórez, no es más que una explosión de tecnología que ha permitido que aparezcan nuevas formas de hacer negocio: «Esto provoca que las empresas se vean obligadas a cambiar para aprovechar estas tecnologías porque, de no hacerlo, se enfrentan a grandes amenazas para sus negocios, incluso por parte de compañías que no están en su sector».
Si fallas, el coste tampoco es tan elevado comparado con lo que era en el pasado
Para el Consejero Delegado de Capgemini, efectivamente la digitalización ha reducido mucho las barreras de entrada: «Puedes acceder mucho más rápido a pruebas de concepto en otros modelos de negocio, y si fallas, el coste tampoco es tan elevado comparado con lo que era en el pasado. Lo cierto es que el concepto de innovación ha evolucionado considerablemente en los últimos tiempos», afirma.
En un mundo en constante cambio, ante la premisa de adaptarse o ‘morir’, la innovación ha optado por la primera opción y el concepto ha ido evolucionando en los últimos años a un ritmo vertiginoso.
«Hace 10 años que dirijo el departamento de Innovación de Ferrovial. Desde entonces llevamos enfocando la innovación como algo abierto. Y lo hicimos así porque pensábamos que había mucho talento fuera de la compañía. Queríamos aprovechar para Ferrovial todas esas ideas externas. Nosotros no tenemos ningún edificio de innovación, construimos proyectos en base a retos de negocio específicos. Y esos proyectos pueden estar formados por personal de Ferrovial, pero también por personas o entidades externas, universidades, etc. Además, creamos un modelo de negocio para que la gente sugiera ideas desde dentro de la compañía. Ya tenemos aproximadamente unos 3.000 modelos nuevos propuestos por empleados, hay 3.000 ideas de negocio que Ferrovial podría lanzar», relata Flórez.
Tenemos aproximadamente unos 3.000 modelos nuevos propuestos por empleados, hay 3.000 ideas de negocio que Ferrovial podría lanzar
Diálogos Directivos – Ecosistemas de Innovación con Capgemini y Ferrovial
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«También es cierto que la innovación se ha vuelto mucho más práctica. Antes se nos llenaba la boca al hablar de innovación y creíamos que era hacer algo novedoso, bonito. Hoy ninguna empresa va a ejecutar un proyecto de innovación si no tiene claro cuál va a ser el retorno», apunta Benítez.
Preguntado por la manera en la que se instaura una cultura de innovación en una empresa como Capgemini, lo tiene claro: «Llevamos 51 años en el mercado y la empresa es como una start-up. Es difícil decir que somos una start-up con 200.000 empleados, pero sí que existe un germen continuo a la hora de cambiar las cosas. Y además, estamos en un mercado en el que o estás a la vanguardia buscando soluciones nuevas o planteándote si lo que estás haciendo se puede mejorar, o el propio mercado te expulsa. Montar un departamento de innovación y pedirle que innove no sirve de nada. Pero si fomentas un ecosistema para pensar en ideas, eso funciona».
Capgemini ha escogido un edificio vanguardista y sostenible para ubicar su nueva sede corporativa en España. Pero no se trata únicamente de un cambio de sede o de mobiliario, sino también en la forma de trabajar.
A las ideas hay que darles un margen de vida porque muchas veces aquellas que pueden parecer peregrinas son las que pueden cambiar tu empresa
“Los clientes nos exigen que haya cada vez ideas más verticales, que los problemas de negocio se solucionen de arriba abajo y no de forma horizontal como tradicionalmente lo veníamos haciendo. Ahora hemos multiplicado los espacios colaborativos con el objetivo de fomentar la interacción entre los empleados. Por otro lado, consideramos muy importante no matar una idea en su origen. Cuando surge una idea rompedora siempre va a haber alguien que diga que no es posible llevarla a cabo. Yo creo que a las ideas hay que darles un margen de vida porque muchas veces aquellas que pueden parecer peregrinas son las que pueden cambiar tu empresa», asegura el Consejero Delegado de la compañía.
Sin duda la innovación es también uno de los elementos estratégicos clave en Ferrovial. Son tantos los proyectos en los que están inmersos, que no es fácil decantarse por uno solo: «Lanzamos alrededor de 100 proyectos al año y todos son igual de importantes porque tocan áreas de negocio diferentes. Estamos apostando por la construcción del futuro, por el análisis o la monetización de datos de la compañía. Sí que es cierto que la movilidad es un tema en el que estamos haciendo cosas muy interesantes porque se sale del negocio tradicional de Ferrovial. De hecho, recientemente hemos lanzado una plataforma de movilidad para los ciudadanos de Madrid: se trata de Zity, un servicio de carsharing eléctrico para desplazarse de manera sostenible. Pero también tenemos proyectos de robotización y proyectos biotech que permiten optimizar el mantenimiento y la gestión de las infraestructuras».
Si hay algo claro es que estamos viviendo tiempos de cambio, todo sucede a un ritmo vertiginoso y la tecnología y la digitalización están presentes en todos los ámbitos de la vida.
Las claves para abordar la transformación con éxito (en general, no solo digital) no son fáciles de descifrar. Para Flórez, lo primero es atreverse: «hay que lanzarse a buscar cosas nuevas, formas de hacer distintas, y eso se hace con ensayo y error. Hay que ser rápido. La tecnología ofrece oportunidades y hay que intentar encontrarlas, probarlas y si funcionan, implantarlas. En el momento en el que encuentras una startup, hay que tratar de lanzarla rápidamente porque la competencia la va a acabar descubriendo. La disrupción tiene un tiempo limitado».
Hay que lanzarse a buscar cosas nuevas, formas de hacer distintas, y eso se hace con ensayo y error
Y para concluir, una pregunta al aire: La tecnología vive un momento de explosión absoluta, hay muchas tecnologías disruptivas, pero si tuvierais que quedaros con una, ¿con cuál sería? ¿Cuál creéis que cambiaría absolutamente el sector en el que operan vuestras respectivas compañías?
¿Estáis preparados?