Los expertos lo tienen claro: la volatilidad de las inversiones, y más en los tiempos que corren, es algo normal dentro del largo plazo. Y no, no es lo mismo que el riesgo como muchos podrían pensar, puesto que este sí supone una acción inminente de pérdida.
De hecho, diversos analistas como los de Fidelity International subrayan que «la volatilidad bursátil es una parte inevitable e indisociable de la inversión». Asimismo, recuerdan que «son el resultado de las reacciones (excesivas) de los inversores a los cambios económicos, políticos y empresariales”.
La mentalidad es clave, y es que cuando estamos preparados desde el comienzo para los episodios de volatilidad de las inversiones, tenemos más probabilidades de reaccionar racionalmente y seguir centrados en nuestros objetivos a largo plazo.
Como bien asegura el famoso inversor Warren Buffett, «a menos que puedas ver cómo tus inversiones en acciones pierden un 50% sin caer en el pánico, no deberías invertir en bolsa».
Las correcciones del mercado pueden crear oportunidades atractivas, puesto que las pérdidas bursátiles suelen dar paso a rebotes hasta nuevos máximos
Además, desde el propio mercado inversor se insiste en que, a largo plazo, el riesgo bursátil suele obtener incluso recompensa. Y que, de igual forma, las correcciones del mercado pueden crear oportunidades atractivas, puesto que las pérdidas bursátiles suelen dar paso a rebotes hasta nuevos máximos. Eso sí, desde la gestora internacional de fondos recomiendan evitar salir y entrar de las inversiones, y es que «perderse los mejores días del mercado puede afectar considerablemente las rentabilidades a largo plazo».
Salman Ahmed, Responsable Global Macro de Fidelity International, destacaba recientemente que los episodios de mayor tensión entre Rusia, Ucrania y Occidente han provocado en las últimas semanas una aversión al riesgo y periodos de caídas en las bolsas. De hecho, el experto destaca que «la presión vendedora arrancó en noviembre, aunque ha sido durante las primeras semanas de 2022 cuando la bolsa rusa ha perdido más de un 18% (en dólares). Todo, después de que el gobierno del país desplegara más tropas en la frontera ucraniana, desatando con ello el miedo a un ataque inminente».
Pese al lógico nerviosismo que se ha apoderado de los mercados, los inversores deben mirar más allá del ruido ensordecedor
Asimismo, y atendiendo a las últimas horas de la crisis en Ucrania, el Ibex 35 y el resto de Bolsas europeas se desplomaban. Los mercados internacionales reaccionaban al momento con consecuencias directas. Por ejemplo, el precio del crudo Brent previsto para entregar en abril disparándose por encima de los 102 dólares. Algo esperado por analistas como el estratega de mercado Carsten Roemheld. Recientemente advertía en una entrevista a Bloomberg que la presión sobre el precio de la energía aumentaría significativamente y se sumaría a los riesgos de precios más altos.
No obstante todo lo anterior, los expertos de Fidelity insisten en que «pese al lógico nerviosismo que se ha apoderado de los mercados, los inversores debemos mirar más allá de este ruido ensordecedor y no dejarnos arrastrar por el mismo. Hay que mantener la cabeza fría para evitar dañar nuestras carteras a medio y largo plazo».
Invertir en los mercados financieros puede ser una tarea compleja, aunque lucrativa, pero que requiere de sólidas habilidades de análisis, una mentalidad racional y cerebral, un horizonte a largo plazo y paciencia a partes iguales.
En opinión del experto Peter Lynch, «todo el mundo tiene la capacidad mental para ganar dinero en la bolsa, pero no todo el mundo tiene estómago. Las personas susceptibles de venderlo todo en un momento de pánico deberían evitar totalmente las acciones y los fondos de inversión».
Invertir en los mercados requiere de sólidas habilidades de análisis, una mentalidad racional y cerebral, y un horizonte a largo plazo
Es por ello por lo que desde la gestora ven primordial recordar 10 mensajes clave cuando la volatilidad golpea:
Cierto es que los inversores buscan la mejor rentabilidad con el menor riesgo posible y que resulta complejo quedar impasible ante determinados sucesos. Más si cabe cuando nuestras carteras de inversión están en juego. Sin embargo, no hay que olvidar que los mercados financieros siempre están expuestos a ese tipo de variaciones, que es algo natural, por lo que antes de entrar en pánico y dar un paso en falso, párate y piensa.
Y recuerda, tal y como asegura Lynch, «los inversores que se preparan para las correcciones, o que intentan anticiparse a ellas, han perdido mucho más dinero que el que se ha perdido en las propias correcciones».