Según los últimos datos disponibles de Eurostat, España es la quinta nación europea en cuanto a volumen de facturación del sector industrial y VAB en el sector. Los expertos estiman que el impacto económico de IoT en la industria alcanzará los 11,1 billones de dólares para el año 2025.
Para alcanzar esta meta, la aplicación de IoT en la industria como sector estratégico, es primordial. Con ella, los dispositivos adquieren y analizan datos de ubicaciones, personas y activos conectados para actuar en función de los conocimientos en el extremo industrial.
El impacto económico de IoT en la industria alcanzará los 11,1 billones de dólares para el año 2025
El objetivo que se persigue alcanzar mediante la incorporación de IoT radica en la mejora de la eficiencia del sector industrial y la optimización de su producción. Asimismo, la tecnología IoT en el ámbito industrial ofrece la capacidad de disponer de información en tiempo real pudiendo tomar decisiones en base a datos actualizados e interconectados de todos los elementos de la cadena de valor.
Algunas de las grandes ventajas competitivas que ofrece la IoT a la industria, están claras:
¿Estamos preparados para conseguir su implementación? Sí, si superamos 6 grandes desafíos:
Automatización y trazabilidad de procesos, optimizar recursos de producción, crear nuevas oportunidades comerciales, maximizar la eficiencia y agilidad en toda la cadena de valor.
Fortalecimiento y flexibilización de toda la cadena con el uso de robótica y de IoT. Réplicas digitales para reducir riesgos y analizar hipótesis para garantizar el éxito.
Predecciones para mejorar la relación del usuario con nuestro producto o servicio y explorar la opción del pago por uso.
Aumento de la capa de seguridad tecnológica, poniendo el foco sobre el diseño del software.
Incorporación de nuevas metodologías de trabajo y nuevas herramientas colaborativas. Reorganizar la industria partiendo de un cambio cultural que afecte a todos los niveles.
Optimización de la demanda de energía de consumo en todos los puntos de la cadena de producción y reducir la generación de residuos o conseguir su reaprovechamiento.
Son muchas las voces que coinciden en señalar a los fondos Next Generation UE como toda una oportunidad única para financiar y ejecutar las inversiones necesarias para transitar hacia la tan ansiada industria española 5.0.
De aplicarse siguiendo los plazos establecidos, los beneficios para la industria española a medio y largo plazo serían más que notables.
En definitiva, con la irrupción del IoT en la industria de nuestro país se abren infinitud de posibilidades que un sector tan potente no debe desaprovechar. Especialmente para aquellos modelos de negocio disruptivos, su aplicación no solo permitirá mejorar los procesos productivos en cada una de sus fases, sino que, además, posibilitará mejoras en términos de rapidez o eficiencia en las cadenas de suministros.
