Hoy, la IA Generativa amplía a pasos de gigante su capacidad, su campo de acción y sus casos de uso. Disponer de un agente de IA para optimizar procesos; crear imágenes o vídeos a través de un simple mensaje de texto; o incluso revolucionar la experiencia de cliente a través de LLMs avanzados y personalizados, destacan entre los múltiples ‘superpoderes’ que esta tecnología ofrece al entorno empresarial a través de los modelos de IA.
La IA se ha convertido en la tecnología estrella, y así lo atestiguan previsiones como las que revela el informe ‘La oportunidad económica de la IA Generativa en España’, elaborado por Implement Consulting Group para Google: la IA podría suponer un impulso para la economía española de hasta 120.000 millones de euros en la próxima década si se produce una adopción generalizada de esta tecnología.
Y a todas luces, se producirá. El informe ‘Technology Vision’ de Accenture, que recopila información de una encuesta global realizada a 4.777 ejecutivos y directivos de 34 países y 25 industrias, ya reveló en 2023 que, según el 98% de los líderes empresariales, la IA Generativa tendrá un rol importante como elemento central de sus estrategias de negocio en los próximos 3-5 años.
Para aprovechar realmente el valor exponencial de la IA Generativa, los expertos insisten en que las organizaciones deben equilibrar las capacidades del modelo y la infraestructura con el costo, garantizar que los modelos de IA anclen su razonamiento en los datos apropiados y adaptar MLOps para implementar, administrar y mantener modelos a escala.
Dichos modelos ‘se inspiran’ en el material que hemos empleado para entrenarlos, y los ejemplos de uso son casi ilimitados, casi tanto como esas nuevas creaciones que son capaces de producir. Así, organizaciones como Shutterstock y Rakuten aprovechan Imagen 2.0 para generar contenidos de alta calidad y gran precisión a escala empresarial, y compañías como Generali Italia utilizan AutoSxS para evaluar otros modelos.
No obstante todo lo anterior, hoy los expertos ya hablan de la necesidad de avanzar (y aplicar) modelos de nueva generación por el potencial que albergan. Por ejemplo, desde compañías como Google destacan modelos como: