Convencido de la creciente importancia de los beneficios para el bienestar del talento de cualquier compañía, Antonio Sas, Director General de Betterfly en España, subraya en la presente entrevista el valor de contar con una plataforma de autogestión para el empleado.
Afortunadamente, vivimos en un contexto en el que hay mucha más consciencia de la importancia de los beneficios para las personas: no solo como una herramienta para que las empresas puedan atraer y fidelizar talento, sino también como una declaración de la compañía que quiere incentivar una cultura de conciliación y bienestar. Hoy en día, el abanico de beneficios es tan amplio que las empresas que buscan mejorar su propuesta de valor al empleado pueden tener dificultades a la hora de definir por dónde empezar. En ese sentido, recomendamos siempre tomar decisiones basadas en datos y preguntar directamente a los propios empleados, que sabrán decirnos qué beneficios son más importantes para ellos a través de encuestas, grupos de muestreo o entrevistas uno a uno con personas aleatorias.
Según el estudio Betterwork, que realizamos hace pocos meses entre más de 600 empleados en España, los beneficios más valorados son: la flexibilidad para conciliar la vida laboral y personal, seguida por los seguros de salud y otros como los de vida, accidentes o mascotas y, en tercer lugar, los beneficios para mejorar el bienestar económico y financiero, como la retribución flexible. Sin embargo, en los últimos años están ganando mucha fuerza los beneficios con foco en el bienestar físico y emocional, como el entrenamiento deportivo, la nutrición, la psicología y la meditación.
Definitivamente, la financiera es una dimensión del bienestar a veces olvidada, pero sin duda muy valorada por los empleados de cualquier compañía. No solo porque es un camino para aumentar el salario percibido por la persona sin aumentar la masa salarial de la empresa, sino porque también impacta directamente en uno de los factores que más estrés y ansiedad genera a una persona, la dificultad para llegar a fin de mes cuando los precios no hacen más que aumentar.
El mayor desafío cuando implantamos un plan de retribución flexible en una compañía es comunicarlo adecuadamente. Esto implica mucha formación a los equipos ya que, si nunca han disfrutado de estos beneficios, pueden parecer “demasiado buenos para ser verdad”. Por este motivo, hay tantas empresas con planes de retribución flexible que no llegan al 20% de la adhesión, mientras que nuestro cliente medio supera el 70%.
Naturalmente, hay otros factores importantes para lograr tener un plan de beneficios exitoso. Además de la comunicación y la formación, es esencial centralizar todos los beneficios en un único lugar y que sean flexibles para que el propio empleado pueda elegir lo que necesita en cada momento, según vayan cambiando sus momentos vitales o intereses.
Considero que, en general, hay dos motivos por los cuales muchas pymes aún no han implantado este tipo de beneficios. En primer lugar, por falta de tiempo, ya que muchas pequeñas empresas no tienen un departamento de Personas como tal, y la decisión puede llegar a estar en manos del director financiero o incluso del CEO. En ese sentido, es importante recurrir a un proveedor como Betterfly, que ofrece una plataforma de autogestión para el empleado y un equipo de soporte experto que pueda resolver las dudas que surgen habitualmente en el inicio, con el objetivo de no incrementar la carga de trabajo de la empresa.
En segundo lugar, un gran número de pymes no miden aún los costes que tienen de rotación de personal, de absentismo o bajas de larga duración. Por lo tanto, tampoco pueden medir el ahorro que supone implementar un plan de retribución flexible, que va a impactar de forma muy positiva en esas métricas. Afortunadamente, eso también está cambiando, y las empresas de todos los tamaños son conscientes del ROI de los planes de beneficios.
Efectivamente, lo destacable de nuestra plataforma es que somos los únicos que cubrimos todas las dimensiones del bienestar: financiero, emocional, físico y social. Este último se produce a través de las donaciones que generan nuestros usuarios cuando utilizan la app. Cuanto más te cuidas, más ayudas al mundo. Es lo que nos gusta llamar “el efecto Betterfly”.
En cuanto al bienestar físico y emocional, la ventaja de tener una herramienta que reúne este tipo de beneficios en tu móvil es que puedes cuidarte estés donde estés, en cualquier momento o lugar. Esta flexibilidad permite que los equipos no descuiden su salud aunque teletrabajen, viajen mucho o se vayan de vacaciones. Concretamente, para el cuidado físico contamos con un abanico muy extenso de seguros, telemedicina, entrenamiento online, nutricionistas, desafíos y retos de pasos que motivan a la persona a competir de forma sana con sus compañeros.
En cuanto a la salud emocional, destacamos la asistencia psicológica online, meditación, pausas activas y mindfulness. El broche de oro lo ponen nuestros beneficios de formación, que incluyen idiomas y formación profesional en todas las áreas de la empresa.
