El 5G será la próxima Revolución Industrial. Así lo aseguran múltiples expertos, entre ellos, Daniel Jiménez, Director General de Vodafone Business España, quien en la presente entrevista analiza de forma exhaustiva las ventajas disruptivas de una tecnología que se postula ya como el principal acelerador de los modelos de negocio de cada vez más compañías de sectores tan diversos como el del Entretenimiento, el Turismo, el del Automóvil o la Logística.
El 5G no es una nueva evolución de la red como cualquier otra. El 5G supone un cambio realmente radical y disruptivo. Permite hacer cosas que hasta ahora no se podían hacer, abriendo la puerta a un nuevo desarrollo de servicios, con nuevos dispositivos y aplicaciones, y de la mano de una capacidad de red muchísimo más potente y con mayor foco en la conexión, la fiabilidad, la estabilidad y, sobre todo, la latencia. Por primera vez el mundo móvil superará al mundo fijo.
Con todo lo anterior, no cabe duda de que se trata de una tecnología para visionarios y emprendedores, al igual que lo va a ser la computación cuántica; de una tecnología que cambiará los modelos de negocio, los procesos internos de relación y operaciones, la interacción entre empleados mucho más orientada al vídeo, e incluso la manera de compartir información. Pero también el 5G traerá la transformación de la industria, del entretenimiento, de las experiencias turísticas, del sector de la industria musical… Eso sí, todo el ecosistema habrá de evolucionar al unísono en torno al 5G.
Así es. Es una realidad desde hace ya más de un año cuando Vodafone anunció el lanzamiento de su servicio comercial en verano de 2019 en 7 ciudades españolas. A partir de ese momento, se ha acelerado la formación de un ecosistema formado por fabricantes, operadores, desarrolladores y empresas que están desarrollando casos de uso novedosos –actualmente, más de 70- y que muchos de ellos verán la luz en breve. Es de la mano de esta colaboración conjunta y con el ingrediente indispensable de la innovación a través del que veremos proyectos y soluciones hasta ahora inalcanzables.
El 5G será una fuente de ventajas competitivas sostenibles para aquellas empresas que sepan maximizar sus funcionalidades aplicadas a su negocio o reinventarlo gracias a esta tecnología: desde mejorar la experiencia de cliente, estar más cerca de sus necesidades, ofrecerle nuevas forma de comunicación y colaboración, conocer el uso que hace de tu producto… hasta mejorar procesos internos como los industriales, gracias a la sensorización de toda la cadena productiva, minimizando los tiempos de mantenimiento y adecuando la misma a la demanda, enlazar esta misma con los procesos logísticos…
Sin duda, el primer sector que ha visto una ganancia nata de todo lo relacionado con 5G ha sido el sector audiovisual, y es que con 5G el efecto retardo ha desaparecido. Y qué decir de la calidad de la imagen. De hecho, TV3, TVE, Mediaset… todos han emitido ya con el 5G de Vodafone. No obstante, otros muchos sectores como el de las Ferias de Muestras, la Industria, la Ingeniería, los Puertos, la Logística, la Aeronáutica, el sector del Automóvil… están muy esperanzados en el 5G y en el abanico de posibilidades que revolucionarán las formas de hacer y, sobre todo, la experiencia que puedan prestar al usuario. Desde luego, 5G te abre la puerta a ‘soñar’ nuevas posibilidades y a derribar ‘limitantes’. 5G es la próxima Revolución Industrial, por lo que no puedes decidir no subirte a este tren.
Así es. La tecnología debe de ser un aliado para estas empresas que decidan invertir en innovación y 5G debe de actuar como palanca para ello. Precisamente 5G puede ser una ventaja competitiva si se adapta a los casos uso con impacto en productividad y servicio, o incluso como generador e nuevos modelos de negocio.
Y vuelvo a la idea anterior, si no te subes a ese tren del 5G, serás un mero espectador de unos desarrollos que harán otros. En mi opinión, España tiene suficiente perfil profesional, suficientes universidades, suficiente talento y empresas con ganas de hacer como para que seamos actores del 5G y no espectadores.
Primero, porque 5G es ya una realidad, y como cada nueva tecnología, debemos de saber cómo aplica en nuestro negocio y cómo nos podemos beneficiar de ella. Segundo, porque si no lo hacemos nosotros lo hará la competencia y quizá esperarles a ellos sea demasiado tarde. Y además de todo lo anterior, porque con 5G puedes tener, en el corto plazo, ahorros y mejoras funcionales de los procesos operativos; en el medio plazo, una mejor experiencia de usuario para empleados y clientes; y en el largo, te abre la puerta a nuevos modelos de negocio y casos de uso que con las limitaciones de antes no podías desarrollar.
Las empresas no pueden perder esta ola de progreso, para ello será necesario que prueben, fallen y un factor clave, que co-innoven, con partners y a veces con otras empresas, incluso del mismo sector, con su competencia.
Así es, suele decirse que quien da primero da dos veces, en 5G podemos decir incluso que da 5 veces más. Al ritmo que evoluciona la tecnología actualmente, no estar en la línea de salida cuando una tecnología da sus primeros pasos puede hacer que más tarde nos cueste mucho más adoptarla.
Si hablamos en términos de funcionalidad, hablamos de velocidad de transmisión, de inmediatez; también, el hecho de interactuar con información que resida en la red va a ser inmediato, las posibilidades aquí de lo que denominamos Edge Computing eran inimaginables hasta ahora; la flexibilidad; o el poder disponer de distintas redes en una sola, mediante la funcionalidad de network slicing. Todas estas posibilidades van a permitir soluciones en todos los ámbitos industriales, desde realizar intervenciones quirúrgicas de forma remota, hasta hacer realidad la realidad aumentada en movilidad a través de dispositivos ligeros y accesibles, poder pilotar drones a distancia con total seguridad, o disponer de distintos niveles de servicio y redes privadas en función de la necesidad de cada empresa. Esta es una de las pocas veces que la tecnología llega probablemente antes de que se haya creado la necesidad, es por ello que decimos que necesitamos retarla desde la innovación y la imaginación. Y desde luego, la mayoría de casos de uso basados en el 5G serán para las empresas.
Lo hará. De aquí a doce meses estoy convencido de que veremos alrededor de 4 usos en el mercado residencial. Y en el mercado empresarial, como he comentado antes, tenemos ya 70 casos de uso. El sector empresarial, en cuestión de 5G, va a ir siempre por delante porque es el que va a ganar más con esta tecnología.
Al igual que para las empresas es relevante comenzar cuanto antes, también lo es para los operadores, y llevar más de un año de ventaja en el despliegue de una red comercial como la de 5G nos permite tener formados y entrenados a todo nuestro equipo de profesionales, desde personal técnico a personal de producto y marketing. Asimismo, durante este año hemos tenido más de 1.500 conversaciones con empresas que han mostrado interés en testar 5G, y de estas conversaciones han surgido más de 70 casos de uso, algo que sin duda es difícil de provocar si no has lanzado la red.
5G tiene todos los ingredientes para acelerar una transformación digital real a nivel sociedad, y al ser habilitadora de otras tecnologías -como el Cloud, la IA, Machine Learning, Realidad Virtual y Aumentada, IoT- va a permitir desarrollar soluciones que hasta ahora sólo habíamos visto en el cine.
