Modelar una función financiera que impulse realmente el crecimiento de la empresa es un objetivo compartido a día de hoy por cada vez más compañías. Un objetivo a través del que el equipo financiero podría convertirse en un departamento estratégico agragador de valor y generador de eficiencias.
Pero, ¿cómo hacerlo? ¿Cómo librarse de todas aquellas tareas administrativas manuales que generan poco valor? ¿Qué otros desafíos se plantean para la función financiera?
5 pasos para activar una función financiera que impulse el crecimiento
- Eliminar la fricción entre equipos financieros y no financieros. El equipo financiero debe involucrarse con todas las áreas de una organización, desde Recursos Humanos hasta Marketing, para apoyar la creación de presupuestos y políticas, y gestionar los gastos.
- Entender los retos que enfrentan otros departamentos. Todos deben ser conscientes de la importancia de la función financiera, de por qué necesitan información sobre los gastos y de por qué es importante recibirla a tiempo. Pero de la misma forma, Finanzas debe preocuparse de comprender mejor los retos a los que se enfrentan otras áreas.
- Aprender de las áreas no financieras, y viceversa. Los equipos de Finanzas pueden aprender cómo otros departamentos utilizan sus datos en la organización, especialmente los equipos de Tecnología, Ventas y Marketing. Pero, al mismo tiempo, todos los equipos no financieros tienen que presupuestar y gestionar proyectos, y Finanzas puede ayudar en estos procesos de negocio.
- Contar con un software de gestión de gastos que facilite la función. El equipo de Finanzas necesita un software dinámico y sencillo que anime a otros departamentos a compartir la información con facilidad. Un software que además reduzca el tiempo dedicado a la recolección manual de recibos y a las antiguas técnicas de gestión de gastos.
- Ofrecer una buena experiencia a los empleados financieros. Sin empleados satisfechos no se tiene una empresa. En el caso del área financiera, la generación de informes sobre el rendimiento financiero debe ser sencilla. Y parte de esto implica facilitar a los empleados la carga de sus recibos o realizar los pagos a través de tarjetas de empresa.
El papel de la digitalización y la innovación tecnológica
“El rol de los CFOs está evolucionando para alinearse a las demandas actuales de transformación digital que enfrentan sus empresas. Hoy en día, más que ser agentes que protegen el valor, su rol tiene un papel estratégico en la toma de decisiones”, expone al respecto Anderson Ramírez en TMT & Digital Services Leader en PwC México.
Precisamente, una encuesta global en torno a la figura del CFO Digital de PwC destaca la importancia de la transformación digital para los líderes financieros. Tal es así que 9 de cada 10 entrevistados considera que la digitalización y la innovación tecnológica tiene un alto nivel de prioridad en su empresa, en tanto que son ejes vertebradores a la hora de impulsar la función financiera. El “pero” es que solo el 69% de los responsables de las áreas financieras tiene una estrategia clara de digitalización y un plan de implementación.
Bajo su experiencia, Anderson cree que cuatro lecciones pueden detonar un cambio de rol:
- El CFO es un socio estratégico. “Las empresas están transformando sus modelos de negocio con una mayor relevancia en la digitalización, lo que implica impulsar el uso de tecnologías que coadyuven a este esfuerzo, pero también que aumenten la productividad y reduzcan costos”, reflexiona el experto.
- El CFO debe tomar el papel de agente transformador. Que, a través de “hacer suya la digitalización” pueda generar información financiera de valor para una mejor toma de decisiones no solo en su área, sino en toda la organización.
- La digitalización comienza en la función financiera. “A través de tecnologías como la IA, la centralización de datos o la automatización de procesos, es posible identificar información accionable para el negocio que podría haber pasado desapercibida para la toma de decisiones”.
- Es importante que las iniciativas digitales tengan un ROI exitoso. Esto no solo significa aumentar el valor de la compañía, “sino lograr los objetivos de la transformación, ya sean reducir costos, aumentar productividad o ser más ágiles”.