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El fin del momento ‘tupper’: cómo hacer de la hora de comer una experiencia de calidad para tu plantilla

Si has analizado las respuestas y reflexiones de una encuesta de satisfacción laboral de tu empresa, no te sorprenderá que la hora de comer sea uno de los momentos más denostados, inútiles e incómodos. La inmensa mayoría de los trabajadores preferirían entrar y, por ende, salir antes de sus puestos de trabajo antes que tener que continuar haciendo frente a este intervalo. Algo completamente inviable para determinadas empresas y sectores. La solución no pasa por un cambio de horarios: puedes convertir esta pausa diaria en una auténtica experiencia de calidad para tu plantilla. 

A la mala y reiterativa imagen de ‘la hora de comer’, se suma que cada vez más empleados (y empresas) se empiezan a preocupar por la calidad alimentaria en la oficina. Y no es casualidad que ya se estén implementando estilos de trabajo saludables en la oficina para que más de la mitad de los españoles no tenga que enfrentarse al momento ‘tupper’ y puedan encontrar tanto productos como ambientes saludables durante el almuerzo. ¿Cómo?

Según la OIT la mala alimentación en el lugar de trabajo puede causar hasta un 20% menos de productividad en los empleados

«Para nosotros el ‘comedor’ no es solo un lugar al que ‘ir a comer’. Se trata de un espacio en el que se transmiten valores como la importancia y la cultura de los alimentos, que contribuye a crear hábitos alimentarios equilibrados y saludables», explica María López Ortiz, directora corporativa de Servicios Jurídicos y Relaciones Institucionales de la compañía especializada en restauración empresarial Ausolan.

Con más de 50 años de experiencia en el sector,  llevan tiempo ofreciendo a las empresas una de las soluciones más innovadoras: implantar comedores diseñado ad hoc en el propio lugar de trabajo. No solo porque mejoran la calidad de los alimentos que consumen los trabajadores, sino porque además permiten que se pierda menos tiempo en inacabables colas frente al microondas o bajando al restaurante más cercano a por comida para llevar. 

hora de comer una experiencia de calidad empleados

Una ‘mala comida’ repercute en el rendimiento laboral

“A veces, ocurre que la dinámica laboral junto con las circunstancias propias de la persona, invita a ‘saltarse comidas’, e incluso en algunos casos a sistemáticamente sustituirlas por un ‘take away’ no siempre equilibrado. A la larga, esto influye no solo en el rendimiento laboral, sino en la propia condición física, en la sensación de cansancio y agotamiento mental, lo que acaba repercutiendo en todas las facetas de la vida», explica López Ortiz.

«Por todo ello, creemos que el comedor es una de las principales herramientas que tenemos las empresas para cuidar a nuestras personas. Considerarlo ‘solo’ como una prestación en especie quizá sea una idea que debamos desterrar; es un beneficio emocional y real que, si se diseña y gestiona bien, es altamente apreciado por los trabajadores», añade.

Un comedor diseñado ad hoc ayuda a que el personal pierda menos tiempo en inacabables colas frente al microondas o bajando al restaurante más cercano a por comida para llevar

Considerar el comedor empresarial “solo” como una prestación en especie, quizá sea una idea que debamos desterrar. Tal y como explican los expertos, «es un beneficio emocional y real que, si se diseña y gestiona bien, es altamente apreciado por los trabajadores».

9 de cada 10 empresas quieren ser saludables

hora de comer una experiencia de calidadLos últimos estudios apuntan en este sentido: según el informe ‘Nutrición saludable en el lugar de trabajo’, elaborado por la compañía ISS Iberia, el 87% de las compañías de nuestro país considera que la salud y el bienestar en el lugar de trabajo son aspectos importantes a la hora de mejorar el rendimiento.

No solo eso. Según la OIT (Organización Internacional del Trabajo) considera que la mala alimentación en el lugar de trabajo puede causar hasta un 20% menos de productividad en los empleados. 

De ahí que López Ortiz insista en la idea de que el comedor en la empresa, no es solo positivo para el trabajador, sino sobre todo, lo es para la propia organización: «Bien gestionado, contribuye al manteniendo de un buen clima laboral, a la fidelización o retención del talento existente en la organización así como a la captación el nuevo.

En el ámbito empresarial, el comedor contribuye a crear hábitos alimentarios equilibrados y saludables. No solo invita a probar nuevos alimentos, nuevas preparaciones, sino nuevos productos. Desde este perspectiva, apuntan desde Ausolan, «estos espacios ayudan a crear hábitos saludables creando una experiencia de calidad para las plantillas».

También es una cuestión de higiene: según un estudio realizado en 2004 por la Universidad de Arizona, los teclados de los ordenadores de las oficinas pueden llegar a contener hasta 400 veces más bacterias que los cuartos de baño del mismo espacio de trabajo. Sin embargo, muchos empleados siguen comiendo mientras teclean para optimizar su tiempo de trabajo, lo que contribuye a perpetuar el ciclo antihigiénico de los puestos de trabajo.

Un espacio en el que se transmiten valores como la importancia y la cultura de los alimentos, que contribuye a crear hábitos alimentarios equilibrados y saludables

Además, el servicio de comedor diseñado por Ausolan hace la vida más fácil a las personas, no solo pensando en la comida de cada día: «El usuario no solo tiene la planificación mensual de comidas, también ponemos a su disposición propuesta de cenas, con el fin de que la ingesta diaria y semanal sea variada y equilibrada». Concebir la hora de comer como un espacio que facilita la vida y los ayuda a optimizar nuestro tiempo libre supone una transformación total para las organizaciones que lo aplican.

Por todo ello, un “comedor sostenible”, tiene una relación directa con la motivación y la productividad de los trabajadores; y, sobre todo, permite llevar una alimentación sana en el trabajo, lo que repercute en una mayor salud física y mental.

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