Vivimos en un mundo dominado por la incertidumbre. Es un mundo muy impredecible y arriesgado. Ante un panorama tan incierto, ante este ‘mundo que nos viene’, Josep Piqué, Político, Empresario y Economista, aprovechó la ocasión para dar una interesante conferencia el pasado 22 de febrero en Bilbao, organizada por APD, Ibercaja y Cesce, con el objetivo de hablar de las claves que puedan ayudar a interpretar las cosas que nos están sucediendo.
Tras la bienvenida a cargo de Fernando Querejeta, Presidente en Zona Norte de APD y Presidente de la Junta de Socios y Consejero de IDOM; Manuel Alves Antunes, Director Territorial Norte de Cesce; y Jesús Les Mancho. Director Territorial Norte de Ibercaja Banco, Piqué comenzó hablando del binomio globalización y revolución tecnológica señalando que “son dos caras de la misma moneda. La globalización genera incertidumbre y de ahí surgen movimientos contrarios y hay un aprovechamiento político de estos movimientos, que no son nuevos”.
Hoy lo más relevante es que occidente y los valores democráticos no tienen solo enemigos y adversarios a nivel externo, sino también interno
Lo cierto es que nos hemos acostumbrado a pensar que occidente ha sido hegemónico, pero esta idea se está quedando caduca con la llegada de la revolución tecnológica. Un hecho que está siendo aprovechado por otros países de no occidente para recuperar su papel.
«Se habla de un mundo post occidental, donde el mayor peso no reside en Occidente. El centro de gravedad del planeta está en el Estrecho de Malaka (conexión natural entre el pacífico y el índico), y se ha convertido en el lugar geográfico más estratégico», afirmó Piqué.
Por lo tanto, la gran pugna en esta primera mitad de siglo por la hegemonía mundial va a ser tecnológica. Una pugna en la que China está haciendo un esfuerzo extraordinario para ser el líder mundial y muchos conflictos van a tener que ver con eso. «China no es un país emergente, ha emergido ya y es una potencia tecnológica».
Durante su discurso, Piqué señaló que en el mundo anglosajón se está produciendo ahora un «repliegue», y en el Reino Unido, el ejemplo más claro es el Brexit, que ha provocado varias fracturas internas. “No sabemos aún los costes económicos que tendrá para Europa, pero a nivel político ha puesto de manifiesto que se pueda retroceder, sentando un precedente para otros experimentos políticos”.
Por su parte, la manera que tiene Estados Unidos de «replegarse» es poniendo en cuestión alianzas internacionales y con los países aliados de Occidente al considerar que su capacidad de negociación mejora si lo hace de manera bilateral, algo de lo que China «se está aprovechando». Tras afirmar que a Trump lo más probable es que le queden 6 años de presidencia, comentó en su favor que “es de los pocos políticos que está cumpliendo con su programa, aplicando decisiones que dijo que iba a tomar”.
China quiere ser la gran potencia mundial a mediados del presente siglo, es su objetivo y así lo han manifestado y lo manifiestan
Según Piqué, para entender el espacio internacional hay que tener en cuenta que la geografía siempre está y la historia siempre vuelve. Y afirmó que China no se está desplegando, sino redesplegando. “Está volviendo a tomar el papel que tuvo siglos atrás, está recuperando su ser. China es ahora una potencia tecnológica. China quiere ser la gran potencia mundial a mediados del presente siglo, es su objetivo y así lo han manifestado y lo manifiestan. Su estrategia está enfocada a ser el líder mundial. China ha creado su fondo monetario o su Banco Mundial, lo que hace que su proyección al exterior sea clara”, concluyó.
