Los cambios en la empresa son inevitables y producen un fenómeno que denominamos resistencia al cambio organizacional. ¿Qué sucede en estos casos? Los empleados se oponen y muestran resistencia porque no quieren modificar sus procesos y la manera que tienen de trabajar y de colaborar con los demás. Pero este fenómeno es más habitual de lo que pensamos y sucede en muchas organizaciones independientemente de su tamaño.
En ocasiones nos encontramos en una zona de confort en la que nos sentimos cómodos y cualquier cosa que altere esa normalidad nos incomoda. ¿Reacción? Resistencia.
La gestión del cambio es una labor clave en el departamento de RR. HH. que implica romper hábitos y tendencias culturales para dar paso a la novedad. ¿Complicado?
Lo cierto es que realizar modificaciones en la conducta de las personas puede llegar a ser una tarea muy compleja a la que deben hacer frente los profesionales y directivos de RR. HH. para alcanzar el bienestar laboral.
La resistencia al cambio organizacional son todas aquellas situaciones que viven o experimentan los empleados que se ven empujados hacia un proceso de cambio que implica modificaciones en sus hábitos y rutina, pero estos se oponen generalmente por dos tipos de motivos relacionados:
La resistencia es la consecuencia al fenómeno que hemos desarrollado anteriormente y puede manifestarse de dos maneras:
El ser humano es un animal de costumbres y prueba de ello es su resistencia al cambio. Cuando tratamos de modificar hábitos, tradiciones o rutinas las personas experimentamos rechazo y negación antes de aceptar lo que nos viene. No evaluamos el cambio desde un punto de vista onírico, simplemente desconfiamos de la novedad porque no la manejamos ni somos dueños de ella. Cierto es que todas las personas no experimentan el mismo grado de resistencia al cambio y que mientras unos lo abrazan y prosperan con él, otros lo rechazan y no lo aceptan.
La resistencia al cambio organizacional son todas aquellas situaciones que viven o experimentan los empleados que se ven empujados hacia un proceso de cambio
Las causas que generan la resistencia al cambio son múltiples y variadas, por ejemplo:
Conocer las fuentes y el origen de la resistencia al cambio puede ayudarnos a combatirla. Antes de centrarnos en la creación de una estrategia que sepa defender los motivos por los que luchamos se requiere conocer en profundidad el origen y a las personas que se oponen a los cambios empresariales. Con este paso previo nos aseguraremos de conocer los pilares sobre los que se cimienta el miedo a cambiar.
Conocer las fuentes y el origen de la resistencia al cambio puede ayudarnos a combatirla
Existen múltiples técnicas y sugerencias para gestionar la resistencia al cambio organizacional. Algunas de ellas son:
Implica a los empleados en el cambio, que formen parte de él para fomentar un espíritu de compromiso individual y colectivo.
Es un punto clave a través del cual debe vehiculizarse el cambio. Anticiparse a la falta de información por parte de los empleados nos ayudará a cubrir la desconfianza. La comunicación debe ser efectiva y bilateral. Debemos propiciar entornos cómodos donde se generen dudas y preguntas por parte de los trabajadores, darles espacio para que demuestren sus inquietudes.
Los líderes directivos del cambio deben promover climas de confianza que den paso a relaciones sanas y positivas dentro de la empresa.
Acciones sólidas y coherentes para que no desaparezcan con facilidad en el tiempo y que no sean rechazadas de inmediato, que inviten a probar y a experimentar con ellas.
Los empleados motivados aceptarán mejor el cambio y ayudarán a otros a ver el bien común.
Los cambios son necesarios y más aún en el mundo tecnológico en el que nos adentramos desde las organizaciones. Sin cambio no hay innovación y sin innovación no podemos conquistar el futuro.
Son 3 los elementos necesarios para aplicar con éxito el cambio: pasión, metodología y estrategia
La manera que tenemos desde las organizaciones de combatir la resistencia al cambio depende de una adecuada y exitosa estrategia. Son 3 en realidad los elementos necesarios para aplicar con éxito el cambio: pasión, metodología y estrategia.