La protección del medioambiente y la transformación sostenible se ha convertido en las últimas décadas en un asunto prioritario para todas las compañías por los riesgos y las oportunidades que supone. Además, vivimos un patente aumento en la toma de conciencia de consumidores, inversores y empleados hacia el cuidado del planeta, y la necesidad de realizar las actividades de forma más sostenible.
Desde hace casi dos décadas, Telefónica es un grupo comprometido con la sostenibilidad haciendo girar todas sus acciones sobre los principios del Pacto Global y con los ODS de la ONU. Trabajamos para que nuestro impacto sobre el entorno sea mínimo y apostamos por desvincular el crecimiento del negocio de nuestra huella ambiental.
De hecho, nos hemos propuesto como objetivo del Grupo llegar a emisiones netas cero en 2025 en nuestros principales mercados, y en 2040 a escala mundial y en nuestra cadena de valor.
Nos hemos propuesto como objetivo del Grupo llegar a emisiones netas cero en 2025 en nuestros principales mercados
Por otra parte, la digitalización es una herramienta clave para la descarbonización de la economía y para afrontar los retos ambientales: cambio climático, economía circular, gestión del agua o biodiversidad.
Nuestros objetivos medioambientales no solo son compatibles con la expansión de la red y la calidad del servicio, sino que nos ayudan a ser más competitivos. Nuestras metas están validadas por la iniciativa Science Based Targets (SBTi) y van más allá del Acuerdo de París.
Así, por octavo año consecutivo, el Grupo Telefónica se ha consolidado como empresa líder contra el cambio climático en el ranking mundial elaborado por el Carbon Disclosure Project (CDP), organización sin ánimo de lucro especializada en impacto ambiental.
Ayudar a descarbonizar la economía es algo que no podemos hacer solos. Por ello, Telefónica, en calidad de socio integral de numerosas empresas, ofrece soluciones y servicios digitales que contribuyen a aumentar su eficiencia energética y su sostenibilidad.
El 58% de los servicios cuentan con el sello Eco Smart, que permite a las empresas de cualquier tamaño y sector elegir soluciones que reducen su consumo de energía y agua, disminuyendo sus emisiones de CO2. Esto ha permitido que en 2021 los clientes de Telefónica España evitaran 2,46 millones de toneladas de CO2, equivalente a plantar un bosque de 40 millones de árboles.
Nuestros objetivos medioambientales no solo son compatibles con la expansión de la red y la calidad del servicio, sino que nos ayudan a ser más competitivos
Recientemente, el Grupo ha presentado su Plan de Economía Circular, alineado con la GSMA (Groupe Speciale Mobile Association). Este tiene como fin alcanzar Cero Residuos en 2030 mediante la reparación, la reutilización y el reciclaje, garantizando que sus residuos no se incineran o terminan en un vertedero, sino que se transforman en materias primas que son re-introducidas en la cadena de valor.
Por último, Telefónica lleva años alineando la sostenibilidad ambiental y social con la financiera; esto le ha llevado a ser un gran emisor sostenible del sector de telecomunicaciones en el mercado de bonos, tanto en volumen como en número y en diversificación de emisiones, trabajando en estos momentos para ampliar su modelo de financiación bajo criterios ESG. ¿El objetivo? Superar los 10.000 millones de euros en los próximos años.
A las empresas ya no nos basta con una gestión responsable y un desempeño excelente. Para Telefónica, la sostenibilidad es aportar valor a los clientes y acelerar la recuperación económica y social de España logrando que esta sea más justa, verde y próspera para todos.
