Espacios Seguros y Eficientes, Espacios del Futuro
Los nuevos espacios de trabajo son una realidad tras la covid-19. Sin duda, el ámbito laboral ha sido uno de los que más se ha visto afectados. El confinamiento implantó el teletrabajo. Tras él, son numerosas las empresas que adaptan sus espacios a la nueva realidad.
Los espacios rediseñados obligan a los usuarios a mantener una distancia mínima de 2 metros entre ellos, a reducir la densidad de empleados y el aforo en sus instalaciones mediante turnos rotatorios de trabajo. También se fomenta la transformación digital, se incluyen mobiliario ergonómico, mamparas de protección o materiales antibacterianos.
Se establecen protocolos de higiene para empleados y puestos de trabajo, señaléticas para lograr una circulación segura y tecnologías como cámaras que controlan la temperatura corporal o sensores en zonas de uso compartido como baños o ascensores.
Con la nueva normalidad implantada, los espacios de trabajo se preparan para acoger las oleadas de trabajadores. Las organizaciones comienzan a implementar distintos cambios para reconfigurar los espacios. Con estos cambios se pretende crear espacios más naturales y lograr que poco a poco se reincorporen más profesionales a sus puestos. ¿Qué medidas se están adoptando en estos nuevos espacios?
Una opción que permite mantener la distancia física. Se separarán puestos entre compañeros, se eliminarán mesas y sillas. En espacios donde los trabajadores están frente a frente, se intercalarán puestos para evitar ponerse cara a cara.
Se identificarán los puestos cerrados al uso y se pintarán flechas en el suelo para trazar un camino en los espacios de trabajo para lograr que los usuarios no se crucen en los pasillos.
Se redistribuyen los puestos para evitar que estén en formato lineal. Una forma de aplicar esta medida es rotando puestos 90º para no enfrentar cara a cara a usuarios en sus puestos.
Si resulta imposible separar puestos, se añadirán divisiones a los lados, al frente y detrás de los empleados. Pueden ser mamparas que cubrirán la altura mínima y serán de fácil limpieza.
Para evitar el uso indiscriminado de elementos como botones de llamada del ascensor o interruptores de luz en baños, se sustituirán por sensores de movimiento que los activen.
Deben ser visibles las medidas de limpieza para concienciar a los usuarios y establecer protocolos. Elementos como gel de manos, toallitas y mascarillas deben estar al alcance todos.
En edificios que alberguen varias oficinas se establecerán horarios alternos de entrada y salida para evitar aglomeraciones. En espacios comunes como cafeterías, vestíbulos o zonas de ocio se limitará el acceso y se reducirá el tiempo de estancia. Los nuevos espacios de trabajo serán híbridos que alternarán zonas privadas y colaborativas. Se impondrá en los lugares donde se pueda habilitar el sistema de oficina abierta. Las ventajas de este tipo de espacio son que facilita el trabajo en equipo, ahorra costes y sociabiliza el espacio laboral.
En las zonas colaborativas se establecerán distintos protocolos y medidas:
El teletrabajo llegó para quedarse con la COVID-19. Antes de la pandemia, según el Banco de España, la población activa que realizaba teletrabajo ascendía al 8,3 %. En la actualidad está cifra se ha incrementado de manera espectacular. Según los expertos, en la nueva normalidad el teletrabajo seguirá permaneciendo. Las empresas organizarán turnos rotatorios de trabajo presencial para evitar una densidad alta de profesionales en espacios que no cuenten con gran aforo.
La pandemia ha sido un buen campo de pruebas para el teletrabajo. Y son muchos los empresarios que lo incorporarán a sus estrategias de producción. Aunque el trabajo presencial seguirá siendo el principal.
Dinámicas, estrategias y nuevos proyectos que se implementarán a lo largo de los meses para definir los nuevos espacios de trabajo tras la pandemia. Las medidas de seguridad y protocolos de convivencia en las empresas se convertirán en algo corriente que los usuarios aceptarán incorporándolos a sus rutinas de trabajo.