WORK BETTER
VOLVAMOS A UNA MEJOR EXPERIENCIA DE TRABAJO
Nuevas formas de trabajo, nuevas dinámicas, nuevas exigencias por parte de empleados y clientes, nuevos estilos de liderazgo… La era post-COVID, entre otros muchos, pone sobre la mesa un claro interrogante: ¿cómo habrán de ser las oficinas del futuro para afrontar con éxito y seguridad los retos de la nueva normalidad?
De hecho, a día de hoy un gran número de organizaciones reflexiona acerca de si sus trabajadores están realmente motivados y comprometidos con la organización mientras trabajan desde sus casas. O lo que es más importante aún, si cuando vuelvan a los espacios físicos, estos estarán lo suficientemente preparados para socializar, aprender, colaborar…
Qué duda cabe que de un tiempo a esta parte, la experiencia de empleado ha cobrado una relevancia especial y una creciente preocupación por parte de las áreas de Recursos Humanos de multitud de organizaciones. El compromiso y la motivación del talento se han convertido hoy en aspectos cruciales para enfrentar los desafíos empresariales con éxito.
Toda una filosofía que coloca a la persona en el centro de las organizaciones y que, por tanto, ha de tener muy en cuenta cuestiones como los espacios en los que se desarrolla la actividad profesional.
Existe una correlación directa entre el compromiso de los trabajadores y su satisfacción con el espacio de trabajo
De hecho, y tal y como concluye el Informe ‘Engagement and the Global Workplace’ elaborado por Steelcase, existe una correlación directa y constatada entre el compromiso de los trabajadores y su satisfacción con el espacio de trabajo en el que desempeñan su función.
En línea con lo anterior, cada vez más compañías toman conciencia de los múltiples beneficios que un correcto planteamiento de los espacios laborales tiene a la hora de mantener el nivel competitivo en el mercado.
Aspectos como la creatividad, el trabajo colaborativo, la co-innovación y, por supuesto, la socialización en el entorno de trabajo favorecen la productividad, la eficiencia y por supuesto la excelencia empresarial.
Tal y como asegura Pociña, «la resolución de problemas complejos no surge gracias a ideas geniales de personas aisladas. La verdadera creatividad surge cuando se reúnen las personas apropiadas en un espacio que les permita desarrollar todo su potencial».
La profunda reflexión en torno al concepto de oficinas del futuro es ya una prioridad estratégica a consecuencia de la COVID-19.
Nada extraño si tenemos en cuenta que el ámbito laboral ha sido uno de los que más se ha visto afectado por la pandemia. Y aunque el confinamiento extendió durante varios meses –y aún lo sigue haciendo en muchos casos– la práctica del teletrabajo, lo cierto es que en el momento actual son numerosas las empresas que se encuentran inmersas en la adaptación de sus espacios a la nueva realidad con un claro objetivo: proteger, por encima de todo, al talento que las conforma, velando así por su completo bienestar.
Obviamente, en estos momentos el principal reto de las organizaciones es el de proteger la salud de los trabajadores. «Las personas son nuestro principal valor y nadie regresará a un espacio de trabajo que no les aporte seguridad», destaca Pociña. Sin embargo, «hoy la clave se encuentra también en saber diseñar espacios productivos que ayuden a las personas a sentirse bien física, psicológica y cognitivamente sin perjudicar el sentido de comunidad, creatividad y productividad», añade.
De hecho, cuando esto ocurra, «ese será el momento en el que las personas irán a la oficina porque quieren ir, porque encuentran lo que necesitan para poder desarrollar todo su potencial«, destaca el directivo de Steelcase.
Hoy la clave se encuentra en saber diseñar espacios productivos que ayuden a las personas a sentirse bien física, psicológica y cognitivamente
Lo cierto es que -así lo aseguran los expertos- el momento actual supone una gran oportunidad para generar entornos de trabajo que no solo nos ayuden a promover una cultura resiliente a la vuelta, sino que sean capaces de adaptarse a cualquier disrupción que podamos vivir en el futuro. Esto es, «espacios para conectar, para reforzar la cultura, para compartir la cercanía…».
En definitiva, «espacios que sean capaces de hacer fluir la colaboración, la participación de todos los equipos y donde se satisfagan las necesidades de todos los profesionales de manera que, en última instancia, esto repercuta de manera positiva en la productividad, tanto de los empleados, como de la propia compañía».
Apps para gestionar los espacios de trabajo, herramientas de control de aforo, soluciones de trabajo a distancia o en movilidad… Gracias a los avances de la digitalización y la aplicación de tecnologías disruptivas como IA, cloud, IoT o Big Data, las soluciones tech que ofrece el mercado se han convertido en palancas estratégicas para todas aquellas organizaciones y negocios que han de adaptar sus espacios de trabajo a las exigencias que plantea la era post-COVID.
Pero, sobre todo, para aquellas que compañías que buscan potenciar aspectos tan cruciales como la productividad, la flexibilidad y la agilidad y, en consecuencia, el engagement y empower del mejor talento. Así serán las oficinas del futuro.